sábado, 8 de diciembre de 2018

Púberes y adolescentes en riesgo de fracaso escolar En Lomas de Carabayllo República Democrática Alemana (San Juan de Miraflores) y Sicuani (ATE)




La pubertad, adolescencia inicial o adolescencia temprana es la primera fase de la adolescencia y de la juventud, normalmente se inicia entre los 12 y 13 años en las niñas y entre 13 y 14 años en los niños y finaliza entre los 15 y 17 años. En la pubertad se lleva a cabo el proceso de cambios bio, físicos, psicológicos en el cual el cuerpo del niño o niña se convierte en adolescente, capaz de desarrollar capacidades y actitudes para desarrollar sus oportunidades con capacidad de resolver problemas, desarrollar capacidades para la ciudadanía subjetiva. Y relacionarse en un ambiente de cooperación y paz.

En esta etapa de vida los púberes y adolescentes atraviesan situaciones de riesgo, siendo más vulnerables los  púberes que viven en condiciones y situaciones de pobreza. Son los factores que reproducen la pobreza las que producen la exclusión de las niñas y niños, púberes y adolescentes. Los avances alcanzados en la alfabetización, en la capacidad de resolver problemas, en valorar la educación comunitaria y el refuerzo cultural como uno de los principales recursos para integrarse socialmente  a la escuela y su comunidad, la movilización de la comunidad para erradicar los factores de exclusión.

Entre los factores de exclusión social, destaca la baja calidad de los aprendizajes básicos que debe alcanzar niñas y niños, púberes y adolescentes, en el servicio que ofrece el sistema escolar. La repitencia o fracaso escolar durante el tránsito del púber a la secundaria puede convertirse en una puerta hacia el pandillaje, inicio sexual precoz, abuso sexual,  consumo de drogas o presencia de conductas de riesgo.

La repitencia o fracaso escolar es, sin duda, un hecho significativo no sólo por la magnitud del problema y por el impacto que provoca en el sistema educativo, sino también, y sobre todo, por el sufrimiento que causa a las víctimas que viven esta situación.

El bullying o acoso escolar tiene causas  múltiples y complejas. Existen, en nuestra sociedad, ciertos factores de riesgo de violencia, como la exclusión social o la exposición a la violencia a través de los medios de comunicación. Sin embargo, la crisis económica y violenta política y guerra interna que vivió el país, y en donde los sectores urbano marginales fueron unas de sus principales victimas, desprotegió de las redes sociales y de las condiciones protectoras que podrían mitigar los efectos de dichos factores, como modelos sociales positivos y solidarios, contextos de disfrute y grupos de pertenencia constructivos o adultos disponibles y atentos para ayudar. 

Otro tema relevante es las frágiles condiciones y constante precarización del empleo de las familias. La falta de empleo, exige cada vez más sobre explotación de a fuerza laboral familiar para tener ingresos regulares que permitan a las familias tener condiciones básicas para cubrir los costes mínimos de la canasta básica familiar. La necesidad de contar con las condiciones mínimas para la sobrevivencia familiar, empuja a muchas niñas y niñas, púberes y adolescentes en actividades económicas para mejorar e ingreso familiar. Culturalmente muchos antropólogos y sociólogos creen que las relaciones de reciprocidad establece un intercambio de mano de obra comunal, formando  parte de los códigos culturales de las poblaciones de migrantes,

La `propia flexibilización del trabajo precario que se ven sometidas las familias (prolongación e intensificación de la jornada,) y su precarización (ofrecer un servicio sin prestaciones ni protección) constituyen las estrategias mediante la que las familias compensa la falta de trabajo  y las ineficiencias del sector productivo púbico y privado, a cambio se observa una situación de trabajo familiar donde la sobre explotación de la fuerza de trabajo de los sectores populares de la población es cada vez mas intensa, pasando largas jornadas fuera de hogar en búsqueda de empleo.

Este conjunto de medidas disminuyen la capacidad de familia en cubrir sus necesidades psico-afectivas y arrebatan al trabajo su valor de movilidad social que tenia, Donde las condiciones económicas, sociales y morales, se ven desplazadas para cubrir las condiciones básicas de sobrevivencia familiar, En consecuencias el empobrecimiento generalizado de la economía familiar,  la degradación de la calidad de su vida y descomposición del ambiente social, siguen siendo las características más importantes a que se ven enfrentadas las familias de los sectores medios y bajos populares.

La realidad de los adolescentes en el país, y en especial de la juventud, esta atravesada por las dificultades propias de la edad, en transito hacia la vida adulta formal, y por las crecientes precariedades y prejuicios sociales que rodean la conformación de su personalidad y expectativas. Ser adolescente en el Perú es una experiencia complicada, debido a la carencia de oportunidades para la práctica de sus aspiraciones personales, y por los crecientes estereotipos provenientes de la vida adulta formalizada, que construyen al adolescente y al joven como un agente peligroso, desorientado e inclinado a malas prácticas.

La ausencia de trabajo, y vivir en ambientes familiares marcados por la violencia y la desintegración, los condiciona negativamente para desarrollarse en la escuela pública y los empuja a los peligros de la calle y el grupo de pares juveniles. La experiencia de la pobreza, y de ambientes familiares inundados de incomprensión y de maltratos, los empuja a fracasar educativamente en muchos casos, y debido a esto imposibilitados posteriormente, para ascender socialmente y romper de este modo la transmisión intergeneracional de la pobreza.

A pesar de la resilencia que demuestran algunos actores juveniles ante la miseria y la falta de capacidades de sus medios barriales, la tasa de cobertura de secundaria no es aún universal en el Perú 79.2% de la población adolescentes entre 12-16 años en el 2010 (ESCALE. MINEDU); esto quiere decir, que predominan factores como la pobreza social, el deterioro en la calidad de la escuela pública, las drogas y la delincuencia, como agentes que interfieren en la correcta asimilación de los contenidos educativos, así como en lo difícil que significa la transición de primaria a secundaria para los adolescentes de 11 a 14 años.

En el caso específico de transiciones educativas de primaria y secundaria, se bosquejan factores que hacen este período una trayectoria particularmente traumática, para el adolescente, como es la exigencia en el currículo, la relación con el docente, el cambio de ambiente escolar, nuevos amigos o nuevos contextos escolares, el acoso escolar, la presencia de las drogas, o la exigencia de dejar etapas más propiamente infantiles en relación a la primaria. En muchas ocasiones estos factores podrían agregarle complicaciones a medios familiares cargados de violencia e incomprensión, generando nuevas exclusiones, causando el abandono escolar, o posibilitando aprendizajes cada vez más precarios, repitencia y atraso escolar (AMES Y ROJAS; 11-12)

Situación de la adolescencia en la comunidad

Como hemos dicho en la parte anterior la vida de un adolescente  transcurre sumergida en tres espacios de socialización determinados, que construyen su personalidad y condicionan su búsqueda de mejores expectativas y mejoramiento personal, como son: la familia, la escuela, y el grupo de pares. Por lo general, los dos primeros deberían ser los que definan su inserción posterior en la vida adulta formalizada, sin embargo, la severa crisis social de estas instituciones sociales, empuja al adolescente a refugiarse en su grupo de pares, como son los jóvenes de la calle, siendo influenciados por los peligros de las drogas, la delincuencia, el pandillaje y la vulnerabilidad en su desarrollo personal que esa decisión significa.

Ante esta autoexclusión y muchas veces decisión forzada del adolescente por los contextos violentos y complicados de la familia y la escuela, estos adolescentes, son vistos en la comunidad cercana como vagos, pandilleros y jóvenes sin futuro, con tendencia a caer en las drogas y portarse mal con sus demás vecinos; aunque muchos de ellos son adolescentes que si hacen lo posible por no caer ante la influencia del medio social, fenómeno que se denomina resilencia, la pronta estigmatización que sufren hace que las recetas para disminuir esta marginación social sean represivas y muestren una flagrante incomprensión de las culturas juveniles que el adolescente constituye por fuera de sus familias y la escuela pública.

Por otra parte si vemos en el colegio, este es visto como un medio en el cual interactúa con otros adolescentes, pero que pronto rechaza pues los aprendizajes que recibe no tienen nada que ver con lo que el joven necesita y desea del futuro. Hay si se quiere un claro abismo social entre el joven, y las dos instituciones, como la familia y la escuela, mediante las cuales el adulto y la sociedad intenta construirlos y asimilarlos (URBINA: 26; 2010)

Si descendemos a las zonas de estudios vemos que la población de púberes, según datos del censo 2007, alcanza 629 adolescentes en los rangos de edades de 10-14 años en Sicuani; en Lomas de Carabayllo 423 púberes; y en RDA 369 respectivamente.

Asimismo, si deseamos observar un indicador que vea el estado de exclusión social en que se hallan los adolescentes en relación al acceso al servicio de salud, vemos que en Sicuani sólo un 22.7% posee SIS; en Lomas de Carabayllo 48.2%; y en RDA 20.0%, porcentajes en relación a la población total que revelan valores importantes, pero aún no relevantes en relación a una población mayoritaria sin cobertura en el servicio de salud (INEI. Censo. 2007)




Aunque es un dato indirecto se observa que en este rango de edades de 10-14 años el estado civil es escasamente de convivencia y de casados, predominando el estado de soltería mayormente en los tres lugares, según datos del censo 2007. Dato que no deja de ocultar que muchos de estos adolescentes son padres precoces, que no se unen matrimonialmente, debido a la dificultad para definir parejas a esta edad, y por la decisión de los padres hombres a no responsabilizarse de estas consecuencias.



Si vemos el índice de nivel de instrucción en los tres lugares estudiados, como un rasgo que permite observar la situación de los adolescentes de 10-14 años, podemos recoger en Sicuani que en estas edades sólo cuentan con el nivel primerio, según datos del censo 2007, 56.7% (357), y solo con nivel secundario porcentajes de 41.9% (264), datos que expresan proporciones poblacionales de adolescentes fuera del sistema educativo.



Según testimonios cualitativos la situación social de los púberes en Sicuani es de una significativa distancia intergeneracional entre los adolescentes y los demás grupos generacionales, exclusión que los lleva ser vistos como jóvenes sin futuro, con problemas de comportamiento, bajo rendimiento escolar, desperdiciando su tiempo en actividades no constructivas, y cercanos a las drogas y a actividades delictivas.

No obstante, vivir en un ambiente barrial de asociatividad que está ganando una percepción positiva de los jóvenes en la barra de Alianza Lima, con la recreación de los patines sktates, y con el trabajo de los vecinos en los últimos años, estas iniciativas aún son embrionarias, ´pues subsiste aún un ambiente de generalización de la venta de drogas, con falta de oportunidades, y limitaciones económicas.

En los últimos años, debido a la gestión del Director Raúl Del Carpio se esta recuperando los liderazgos de varios jóvenes en relación al trabajo social del colegio Bustamante y Rivero, no obstante, persisten severos problemas de calidad educativa y rendimiento escolar por parte de los adolescentes.

Yo creo no están solo ni malgastando su tiempo por ejemplo yo tengo un grupo de jóvenes que montamos skate pero muchas veces somos mal vistos porque como piensan que nos juntamos para montar piensan que matamos el tiempo o que estamos vagando pero eso es un deporte que lo estamos practicando quizás no es como el futbol y por eso nos dicen vago, pero si hay gente que se para en una esquina para robar o fumar pero hay parte de jóvenes que quieren salir adelante como otros que no que solo se quieren truncar y seguir hay mismo” (Jonathan Ore. Adolescente de Sicuani)

En Lomas de Carabayllo, según testimonios recogidos, se percibe una mayor distancia entre los jóvenes y los demás grupos etarios, con hogares desintegrados, violencia familiar e incomprensión y pobreza, adolescentes que no se sienten respaldados por sus padres y que se ven empujados a abandonar la escuela pública y trabajar en oficios diversos como el reciclamiento y la construcción.

En esta zona la necesidad de proveer al ingreso familiar, o de escapar a hogares inundados de violencia, alcoholismo y de desentendimiento de los padres los empuja al trabajo como un modo de asumir sus vidas individuales tempranas, asimismo, los arroja a la calle, iniciándose en las drogas y en el pandillaje, a pesar que el trabajo social de organizaciones sin fines de lucro, como Plan internacional y Pukllay[1], la asociatividad de la organización juvenil Fuerza Juvenil registran iniciativas importantes.

“Lo que te puedo decir es que en el colegio, el 50% o 60% de alumnos trabaja, entonces le dan más importancia a lo económico que a los estudios. De cada salón repiten mínimo 5 alumnos anualmente, y el factor es el tiempo y el trabajo. Y es por la pobreza que algunos empiezan a trabajar. También hay mucha delincuencia y pandillaje. Incluso las drogas corren mucho por acá, venden marihuana y cocaína, y yo sé porque vivo por acá y se juntan en las esquinas. Entonces los factores del fracaso escolar se resumen en el trabajo, la delincuencia y la drogadicción” (Sletter Espinoza. Integrante de Fuerza Juvenil)

En RDA se presenta una situación de fuerte distancia intergeneracional de los adolescentes en relación a los demás grupos etarios, sumergidos en el pandillaje y en las drogas, con bajos rendimientos educativos y provenientes de hogares con fuertes cuotas de incomprensión, falta de cariño y de maltrato. La característica de esta localidad en relación a Lomas de Carabayllo es que la adolescencia se halla capturada por una fuerte actividad pandilleril que influencia en los colegios de la zona como el 7100, y que siembra un clima de inseguridad vecinal importante. Es importante reconocer el trabajo comunitario de la parroquia  Sagrada Familia con las actividades de catequesis a los adolescentes

“Bueno la vida diaria de los adolescentes en esta comunidad veo que del 100% de los adolescentes, el 50% de ellos no asisten al colegio por problemas familiares con mucha violencia, la mala junta con los pandilleros y todo eso influye en su educación... Necesitan mucha comprensión porque están en un cambio de carácter y darle confianza, y lo ven la vida fácil y quieren experimentar los que hacen los maduros; pero hay que comprenderlos es lo mas importante” (Silvia Cruz Rivas-Mónica Chinga. Docentes. RDA)

Inasistencia, repitencia, atraso, deserción.


El colegio es visto por la comunidad, como aquel espacio que puede rescatar a sus hijos de las malas costumbres y la mediocridad; y que puede enrumbarlos a mejores condiciones de vida con el tiempo. Pero no siempre la escuela pública es un lugar que deja de estar influido por el lugar en donde opera. Muchas veces los rendimientos educativos y los problemas de comportamientos que los adolescentes expresan no hallan mejor reproducción que en la cultura escolar, manifestándose en malas relaciones con los docentes, con los contenidos educativos y en clima de violencia con sus compañeros, posibilitando el abismo entre los aprendizajes y las expectativas de los jóvenes.

Si agregamos a ello que la experiencia de la transición a la secundaria es vivida por los púberes como una experiencia cargada de exigencias y nuevas relaciones, haciendo crecer una percepción en ellos de que “la escuela no les sirve para nada” entonces se puede advertir que se amplia una separación excesiva entre los cambios que desea operar el colegio, y la cultura juvenil barrial que se desea modelar (AMES y ROJAS; 24; 2008)

Vemos que los principales problemas que se observan en cuanto la desarrollo escolar son las altas tasas de insistencia, repitencia, atraso escolar, y deserción o abandono escolar. En el Perú, por ejemplo, el porcentaje de repitentes en el 1er año de secundaria a nivel nacional es de 5.9% y en Lima Metropolitana 4.6% en el año 2009; en el 2do año de secundaria a nivel nacional es de 6.1% y en Lima Metropolitana de 5.1%.

A su vez a nivel del sexto de primaria a nivel nacional en el año 2010 el atraso escolar alcanza 16.7% de alumnos matriculados; mientras que en Lima Metropolitana es de 6.8%; en el primer grado de secundaria el atraso escolar a nivel nacional es de 17.1% de alumnos matriculados en el primer año de secundaria, mientras que en Lima Metropolitana es de 9.3% de los alumnos matriculados. Si agregamos a estos rasgos los de abandono escolar, vemos que el porcentaje de deserción escolar a nivel nacional entre las edades de 13 a 19 años es de 8.6%  en el 2009 y en Lima metropolitana alcanza 5.2% de alumnos matriculados (ESCALE.MINEDU).

En todos estos números se advierte que la crisis de la escuela pública lleva a un rechazo en el rendimiento de los alumnos hacia los contenidos educativos y sus métodos de enseñanza, generando como hemos dicho un abismo entre los adolescentes y las instituciones educativas.

Si Bajamos a los escenarios de estudio, podemos recoger que el descuido o negligencia de los padres con sus hijos adolescentes, en hogares precarios, con desnutrición crónica y con escasa comunicación familiar dificulta la adaptación de los púberes y jóvenes en sus tareas de aprendizaje, desarrollándose como hemos dicho más arriba, una severa incomprensión de lo que se enseña, y por lo tanto, el rechazo del adolescente hacia las reglas de sus centros educativos. Este panorama condiciona, no sólo el fenómeno de la inasistencia, sino además los más severos como la repitencia, el atraso escolar y la deserción escolar.

Si vemos cifras recogidos en los centros educativos de la zona observamos en Sicuani que la desaprobación en los cursos en secundaria sólo alcanza a 5 alumnos desaprobados en el 2010, y 27 alumnos desaprobados en el 2011; asimismo vemos según datos del censo 2007 que la cifra de  no asistencia educativa en estas edades de 10 a 14 años alcanza 136 púberes por fuera del sistema educativo.

Igualmente la deserción escolar, según estimaciones del colegio Bustamante y Rivero 5 en 5to de Primaria; 2 en 6to de primaria; 2 en 1º de secundaria; y 3 en 2º de secundaria, datos que revelan que el problema no sea tanto el abandono escolar o la cobertura educativa sino la calidad educativa que ofrecen los centros escolares. Si vemos el atraso escolar, es decir, alumnos que están en grados menores a su edad,  observamos que en Primaria el atraso escolar es sólo de 4%, y en secundaria 3%, poblaciones adolescentes con promedios menores al de Lima metropolitana, y que corresponden a alumnos que provienen de una migración reciente o han tenido dificultades en la transición a  la secundaria.


Si vemos los testimonios, en Sicuani el riesgo de quedar por fuera del sistema educativo es latente, ocasionado por los problemas familiares la precariedad económica, que lleva a los púberes desde temprano a tener dificultades para asimilar apropiadamente los aprendizajes de las escuela, siendo atrapado prontamente por las malas influencias, el alcohol y las drogas, repitiendo por lo tanto el círculo de la pobreza social.

Al ver los datos del colegio Bustamante y Rivero, comentados más arriba, vemos ciertamente el problema es el riesgo de fracasar en el colegio, y ser expulsado del sistema educativo, pero los índices descritos nos señalan que el problema no sería la cobertura sino el ser visto el colegio por los adolescentes como un agente que no se condice con las expectativas de los adolescentes.

“Si también entre ellos hay factores que son consecuencia de lo mismo, hay alumnos que por abandono se van a los vicios, o alumnos que siguen el paso de los padres como el alcohol las drogas, en casa de juegos, en los parques y eso hace que los niños opten por estas distracciones que al estudio entonces ese es otro de los factores que lleva al riesgo escolar. El consumo de alcohol y drogas es alto por la facilidad que tienen para conseguirlas” (Dr. Raúl del Carpio. Escuela Bustamante y Rivero)

En Lomas de Carabayllo al observar las estimaciones recogidas vemos según datos del censo 2007 que hay 114 púberes en las edades de 10 a 14 años por fuera del sistema educativo, siendo mayor la incidencia en los hombres que en las mujeres[2] En los testimonios constatamos que de cada 100 alumnos repiten  sólo 4 alumnos, según palabras de Segundo Huaracc, profesor del colegio Manuel Scorza “Si hay repitencia, pero no lo consideramos un colegio ya que de 100 alumnos, 4 repiten…” (Segundo Huaracc. Docente del Manuel Scorza).

En este sentido afirmamos según los testimonios cualitativos podemos advertir que en esta localidad es mayor la incidencia de abandono escolar y de púberes en estas edades de 10 a 14 años por fuera del sistema educativo, debido sobre todo a la necesidad que se tiene de trabajar, y cubrir así los pocos ingresos que se percibe en los hogares de esta localidad. A su vez se haya presente el problema de hogares disfuncionales donde la incomprensión y la falta de afecto inclinan a la adolescencia a independizarse rápidamente del hogar y de una escuela que no toma en cuenta sus propias aspiraciones personales.

“Mayormente hay abandono escolar porque motivo? Por cuestiones de trabajo, económicas porque se dedican a trabajar a tiempo completo y no les da el tiempo para el estudio” (Gustavo Bejarano. Docente de Juan Pablo II)

En RDA, de acuerdo al tema de la deserción escolar vemos que en los últimos años de primaria  5º y 6º de primaria el abandono escolar ha sido en el año 2011 de 5 y 7 púberes respectivamente que dejaron de asistir al colegio. A su vez en los primeros años de secundaria 1º y 2º  en el 2011 es de 9 y 9 alumnos respectivamente que dejaron de asistir al colegio. En relación al atraso escolar tenemos el dato de que 12 alumnos se hallan en grados de 6º de primaria menores a su edad, en el año 2012 debido a que son niños migrantes o que vienen de otros centros educativos (Información del 7100).

SI vemos los testimonios identificamos los motivos del mal rendimiento de los adolescentes y  por lo tanto sus problemas de conducta. Estas causas residen en hogares que negligen con ellos, con precariedad económica, desnutrición infantil, un medio escolar al que jamás logran adaptarse y un medio social, por fuera del colegio que inhibe los desarrollos personales y sumergen al joven en la mediocridad y en malas decisiones individuales.

“La mayoría repite, o están jalados por problemas de familia, en la casa ve violencia y lo chancan, eso lo aturde y no deje concentrarse además que no hay comida, ni nadie los atiende, por eso vienen a descargarse en el cole o a la salida” (Mirko Taboada. Alcalde escolar del 7100)




Familias y adolescencia.

La Familia es un espacio interno de la sociedad donde se resguardan y se desarrollan los valores ciudadanos que se comunican al niño y al adolescente, y que posteriormente se despliegan en la sociedad. Es un lugar donde se educa y se desarrollan los vínculos sociales y afectivos que dan cobijo a la personalidad y que la conforman.

No obstante, en las últimas décadas esta se haya en un proceso de constante desintegración, donde sus miembros no consiguen sentirse respaldados, se hayan incomprendidos y muchas veces son víctimas de maltrato y de agresión psicológica y física, sobre todo las féminas y los niños.

En los sectores populares donde existe pobreza y ausencia de condiciones de vida mínimas para el desarrollo de la persona vemos  que la familia esta sitiada por violencia y autoritarismo, de negligencia e incomprensión; donde el adolescente en vez de sentirse protegido y estimulado es contantemente golpeado e incomprendido, situación que se proyecta sobre sus relaciones en la escuela y lo hace fracasar educativamente y escapar del hogar hacia la calle y las pandillas.

Según lo anterior, vemos en Sicuani que los adolescentes se sienten desubicados en sus familias, incomprendidos y sin afecto, y por consiguiente, no se sienten con ánimos para asumir las responsabilidades escolares, por lo cual desaprueban y repiten, ya que su tejido familiar no los apoya ni se preocupa por su porvenir.

No obstante, existir en esta localidad un tejido asociativo importante lo cierto es que lo hogares de estos adolescentes se despreocupan de sus miembros más jóvenes, siendo esta problemática interna de los hogares una dificultad latente que no permite resultados expectantes en la escuela. Frente a esto el trabajo social de la escuela con la comunidad intenta hacer retroceder estos hogares disfuncionales, garantizando el involucramiento de los padres con la educación de los hijos, pero los resultados aún son iniciales.

“…y en tanto a la comunidad hablar con los padres se han dado casos de jóvenes que están en malas juntos, se hablan con los padres pero como denominadores no tienen a la familia y no tienen un perfil de padre positivo o hermano o familiar y se encuentran situaciones sensibles donde lo malo viene de la familia y gira en tu entorno que te lleva al consumo de drogas hay hasta niños que venden drogas que han perdido el respeto no hacen la tarea no les importa el estudia y cuando tratas de entrar a estos hogares chocas porque no sabes de quien apoyarte para que el niño cambie de actitud y lo mas preocupante es que no son pocos son muchos porque hay jóvenes en riesgo que viene jalando el padre madre al igual el caso de los padres que están presos que cuando le dices porque tu hijo es así y encuentras mucha violencia en su hogar y tratar ese tema con los padres es difícil, generalmente el riesgo de fracaso escolar se da en estos hogares” (Raúl Del Carpio. Director del colegio Bustamante y Rivero)

En Lomas de Carabayllo, es la precariedad social y económica de los hogares, la que los hace ambientes inapropiados para el desarrollo personal de los adolescentes, donde se viven conflictos y carencia de protección emocional.

La necesidad de hallar ingresos para el hogar y la influencia de un medio barrial signado por la violencia y la presencia estigmatizada de madres precoces hace que sea fuerte la reproducción intergeneracional de la pobreza, de padres a hijos, impidiendo la constitución de vínculo fuerte donde obtenga respaldo el joven para estudiar y ser reconocido. Por eso es justificable la huida de estos jóvenes desde tempranas edades hacia el trabajo y el abandono escolar, pues buscan en el desarrollo complicado de los trabajos precarios un modo de independizarse, aunque muchos también optan por la vía de las malas juntas y el delito.

“Podría ser también los hogares disfuncionales que tienen la mayoría o vive con la mama o vive con el papa o con el segundo compromiso, también hay ese tipo de problemas. ¿Qué le cuentas esos adolecentes de sus hogares? Que generalmente problemas entre los padres, violencia familiar o no se siente augustos en eso y tal ves no son comprendidos por cualquier problema que tengan, les afecta emocionalmente” (Gustavo Bejarano. Docente del Juan Pablo II. Lomas de Carabayllo).


En RDA, al igual que Lomas de Carabayllo en esta localidad, la pobreza y la precariedad social, producto de las dificultades de adaptación que evidencian estos barrios de migrantes a la ciudad moderna, ha generado hogares conflictivos, con alcoholismo y separación, donde a los padres no les interesa la crianza de sus hijos, y por consiguiente sus lazos afectivos, entregados a sus trayectorias personales y muchas veces ingresando en el delito como una manera de crearse un hogar alternativo y comprensión.

En esta zona la separación intergeneracional entre grupos etarios adultos y jóvenes ha sido el caldo de cultivo para la formación de una delincuencia juvenil que crea inseguridad vecinal, y que reproduce la pobreza y el fracaso escolar.

“Las familias de estos pandilleros no le toman interés a sus hijos porque ven que ellos se pueden valer por si solos y los votan de sus casas y no se sienten protegidos y buscan a sus amigos la mayoría de los padres sufren de alcohol y los hijos imitan esas actitudes” (Mirko Taboada. Alcalde escolar del 7100. RDA)


Drogadicción.

Por lo general se sostiene que el consumo temprano de las drogas viene asociado a ambientes deprimidos por la pobreza y descomposición social. Pero en la actualidad el acceso fácil a las drogas y el predominio de una sociedad permisiva, añaden a los tradicionales factores de la drogadicción un origen distinto. En las opiniones de los adolescentes el consumo de las drogas, viene asociado sobre todo a que son comunes entre sus amigos, y que no se necesita encontrar en ellas un escape a la falta de afecto para usarlas (HIDALGO y JÚDEZ;897).

Pero afirmamos según testimonios que el consumo de las drogas en los adolescentes, cerca a los colegios o en lugares de micro comercialización si poseen un móvil afectivo, pues la desinhibición que se proporciona al consumirlas es una ruta de escape para olvidar las frustraciones de los hogares y las limitaciones propias de familias donde hay violencia e incomprensión. Incluso la ludopatía, un problema asociado al consumo de excesivo de videojuegos y el internet es ya una expresión de esta individualización que abandona el esfuerzo, y que hace que se desvíe el adolescente de su desarrollo personal, y por lo tanto se convierte en una población en riesgo de fracaso escolar.

En Sicuani, el consumo de drogas esta instalado en la adolescencia y la juventud, provocando el truncamiento del desarrollo personal de los jóvenes, quienes las consumen porque sus padres cuentan con sus hábitos y porque en su grupo de pares el consumo es algo normal y socializado. Por observación se pudo constatar que Sicuani es una zona frecuente de micro comercialización de drogas, con motos que se estacionan en las esquinas y venden drogas sin que los vecinos puedan hacer algo por detener este problema.

 Analizando el estado de esta problemática que los móviles no siempre son hogares desestructurados o con problemas sino una costumbre empotrada en la juventud y en otros grupos etarios, a pesar del fuerte asociativismo vecinal que intenta reaccionar frente a este problema.

“El joven que consume drogas cambia rotundamente desde su presentación personal se va abandonando su responsabilidad llega tarde constantemente falta cuantas veces sea necesaria no cumple con sus tareas y en otras ocasiones le hace la vida imposible al profesor es un tema difícil y lo mas impactante es que el que consume drogas jala a otro y se hace el grupo y detrás de ese grupo hay mas personas. Se han dado caso de niñas bonitas simpáticas que le entraron al consumo a la venta y esas niñas que son captadas por internet luego las llevan a prostituirse y es como un denominador en ver a este joven con ese espíritu que va jalando a los demás poco a poco o a los jóvenes que los captan les dan la droga para que produzca en su colegio o en sus relaciones sociales hay toda una organización detrás. Hay niños que sus padres también consumen y sus padres los usan como transporte por eso si el padre lo permite, son situaciones difíciles porque es una estructura social de ver normal el vender o consumir droga y aquí en sicuani la droga avanza rápidamente” (Raúl Del Carpio. Director del colegio Bustamante y Rivero. Sicuani)

En Lomas de Carabayllo, se constatan que los factores que hacen posible el consumo de drogas y que potencian las malas conductas delictivas de la juventud están asociados a hogares con problemas y casos de violencia, y a la  necesidad que tienen los jóvenes  de vivir nuevas experiencias y así escapar de sus casas donde no les reconocen ni escuchan sus aspiraciones personales.

Al no haber oportunidades de desarrollo, lo cual conlleva al fracaso escolar la adolescencia se refugia en las drogas que se socializan en los grupos de pares. Aunque, según el profesor Huaracc, este problema ha ido en disminución debido al trabajo de las dirigencias populares sigue latente su importancia en la localidad, pues esta subcultura de las drogas ha adquirido, como en Sicuani, una vida propia, independiente de las otras problemáticas que se han diagnosticado en este estudio.

“Es por la falta de atención y cariño por parte de los padres, por eso los chicos se juntan a las pandillas y es ahí donde les dan a probar la marihuana u otras drogas. Los chicos quieren experimentar cosas nuevas, vivir sensaciones nuevas. Se van a tomar, se van a fumar” (Sletter Espinoza. Miembro de Fuerza Juvenil. Lomas de Carabayllo)

En RDA, al igual que en las dos otras zonas de intervención se ha podido constatar que las drogas es tan presentes en el tejido social,  al alcance de los estudiantes de los colegios y en espacios públicos como la canchita, donde se consume estas sustancias peligrosos; siendo los móviles  hogares con problemas internos y la influencia de malos elementos que socializan este submundo de las drogas. Según testimonios de los entrevistados este problema viene de barrios vecinos y se ha vuelto un impase social que afecta a la juventud, junto con el problema de las pandillas y la delincuencia común.

“Es tan fácil llegar a eso, mas fácil que llegar al conocimiento hasta en la misma casa, ven las películas, las novelas que las drogas no tienen limites, que llega para gente de bajos recursos y a veces por imitación mas que por desesperación los chicos llegan a eso entonces yo entiendo que la problemática en si es algo que a muchos es tocada la desesperación pero pocas veces veo que los chicos entran a las drogas por imitación por las malas influencias y que muchas veces viene disfrazada para ellos algo desconocido que quisieran conocer y ven que las personas que las observan su transformación y las quieren imitar por la convivencia, chocando a una parte buena de ellos” (Ana María Sagastegui. Miembro del Ministerio de Cultura para la comprensión lectora de RDA)


3.1.1.   Acoso  escolar (Bull ying)

Los problemas de acoso escolar se han incrementado en los últimos tiempos. Siempre estuvo presente en cualquier plano de la sociedad, en los centros educativos también, la presencia de abusos y maltratos que desembocan en el daño físico pero sobre todo emocional del agredido o víctima, que puede tener las formas de agresión verbal, exclusión o sexual,  o daño psicológico.

Los factores asociados al Bull ying se ubican en hogares donde el maltrato y la violencia es algo natural proyectándolo sobre la escuela generando un perfil de agresor o de víctima. Por lo general el agresor termina en la delincuencia, y el agredido puede no sólo fracasar escolarmente sino desarrollar una personalidad autodestructiva y con escasas afirmaciones emocionales.

El Bull ying se expresa con burlas y maltratos colectivos, donde el agredido es vapuleado como si fuera un juego en las escuelas, siendo difícil de ser prevenido desde los hogares y de la escuela. (MENÉNDEZ Isabel. 2006. 3) En los últimos años este problema es frecuente en los centros educativo, pero aún no se posee estadísticas fiables para poder diagnosticarlo y combatirlo desde las política de Estado.

En Sicuani, según testimonios el grado de violencia escolar que se vive en el colegio, no es el que habitualmente se considera como violencia escolar, debido al trabajo de los docentes, y al hecho de que este tipo de violencia escolar se gesta en las calles, entre las pandillas y con factores que agravan este hecho como son las drogas.

En las aulas se produce un nivel relevante de acoso escolar, debido a las presiones que existen sobre los adolescentes tímidos o callados para integrar grupos de estudiantes con conductas difíciles y a las pandillas, y a la particular práctica de los estudiantes de molestar con bromas pesadas y la  “Chacota”, como sostiene Jonathan Ore, quien considera, como se registro en grupo focal con púberes, que este Bull ying es solo una práctica socializada entre los adolescentes

Se da en la comunidad y en el colegio y se somete a los niños y niñas y está ligados a los niños de violencia el Bull ying está ligado con las barras bravas, pandillas, con los alumnos o jóvenes que consumen drogas, el consumir la prueba de las drogas si es que el niño no se somete a una prueba totalmente es marginado o amenaza o seguidamente agredido, si no eres de la pandilla y en el aula hay te someten a que te unas o s sino te golpean, en el caso de las niñas igual también se da eso en sus grupos, hay niñas que vinieron del colegio grumete que quisieron someter a otra niña de acá pero con ella no quiso participar le pegaron pero son grupos de jóvenes metidos en consumo de drogas y hay se genera el Bull ying no es una situación que sucede dentro del aula porque tiene que ver con nosotros de repente dentro de las aulas están los orígenes. (Raúl Del Carpio. Director del centro educativo Bustamante y Rivero. Sicuani)


En Lomas de Carabayllo, también se da cierto nivel de violencia escolar en los centros educativos de la zona, pero en el sentido de fastidiar o hacer “chacota” como menciona el profesor Bejarano, pero que produce lideres negativos, y alumnos con bajos niveles de autoestima, que se observan en estos escenarios. El problema que si observa que es muy fuerte más que la violencia escolar es el tema de las drogas cerca a los colegios y el tema del pandillaje en estas zonas marginales.

“No acá no, eso afecta en su autoestima lo lleva hacia abajo y la persona que no se valora que no tiene una autoestima adecuada o ideal es una persona que no podría desarrollarse en todos los ámbitos. Estos lideres negativos que son las chacotas y  se la agarran con los tímidos Por la pasividad los ven vulnerables como dicen al mas débil son los que caen. Pero me dicen ellos que son chacota nada mas, no  Si pero yo en mi clase hago que se mantengan al margen y respeten las normal de convivencia”. (Gustavo Bejarano. Docente del colegio Juan Pablo II. Lomas de Carabayllo)


En RDA, al igual que en Lomas de Carabayllo se afirma que ha existido este problema de Bull ying en el colegio 7100 pero ha disminuido. Lo que no ha descendido es un ambiente donde predomina el maltrato hacia de los débiles o tímidos, como se dicen en los centros educativos, a través de la broma pesada y juegos entre amigos. Lo que si mencionan los testimonios es que este problema haya su origen en hogares donde se repite este escenario de violencia intrafamiliar, y donde es natural la violencia y, la timidez, como producto de la incomprensión y la precariedad social.

“Mayormente en el mundo de los niños esta hecho el fuerte y el débil y al débil le dicen gallina y al ver que tiene plumas es hay donde comienzan a juzgar mucho tiene que ver de quien es su papa su mama y cuando ven que no tiene papa ni mama porque viene maltratada es hay donde suceden estas cosas y están totalmente debilitados y los mas fuertes se aprovechan de los débiles lamentablemente es un acto que no tiene nombre para mi pero que se da, muchas veces los niños callan, no dicen porque creen que guardando silencio van a ahorrar problemas y así como damos estas conferencias deberíamos decirles a los niños unos signos para poder hablar como un amor y paz buscar una señal para poder decir que esta siendo agredido, discriminado y así no se les pueda ver marginación y alejarlo de un hecho vandálico como este” (Ana María Sagástegui. Docente. RDA)


Trabajo y adolescencia.


Según datos del ENAHO 2008 la población adolescente ocupada (PEA) en el entorno urbano en las edades de 6 a 17 años es de 30.8% de la población total, siendo en Lima 17.9%. Estos datos hacen referencia que el trabajo en estas edades ofrecen cifras importantes debido a la precariedad económica de los hogares lo cual arroja a los jóvenes de 10 a 14 años al mercado de trabajo, dejando la escuela pública regular lo que significa baja calificación, siendo, por lo tanto, atrapados por bajas remuneraciones.

Este fenómeno de baja calificación y empleos precarios no permite el despegue socioeconómico de los hogares, y  de los jóvenes, reproduciéndose un ciclo de pobreza. Por otra parte, se observa en las zonas urbano-populares que existe una población importante de jóvenes que declaran trabajar y estudiar al mismo tiempo, 20.5% en el grupo de edades de 6 a 13 años, y 22.3 en el grupo de edades de 14 a 17 años, según datos del ENAHO 2008. A su vez es bueno agregar que existe una población relevante de alumnos que no trabajan ni estudian. 2.1% en las edades de 6 a 13 años; 11.0% en las edades de 14-17 años,  y 5.0% en las edades de 6 a 17 años.

En Sicuani observamos que un 98.1% declaro en el grupo de edades de 10 a 14 años no haber trabajado la semana pasada, a la fecha de haber sido realizado el censo 2007, lo cual evidencia que la PEA en estas edades de trabajo se halla en los siguientes grupos etarios. Por otra parte alrededor de un 15 a 20% de la población de 10 a 14 años trabaja y estudia, según testimonios del Sr Raúl del Carpio. A su vez este mismo informante declaró estimar que unos 15% de adolescentes de 15 a 19 años no trabaja ni estudia. Agregamos a ello que existe una importante población que por dificultades económicas deja de estudiar,  según el Sr. Raúl del Carpio, o hace lo más difícil trabajar y estudiar, pero en trabajos de poca calificación y con bajas remuneraciones.

“…y uno se da cuenta cuando conversa con los jóvenes que no trae los materiales o porque no hacen la tarea y ya comienza uno a explorar y hay buena cantidad de jóvenes como otros jóvenes que ayudan a sus padres en el negocio trabajando horas medio turno o como empleados hay bastantes…” (Raúl Del Carpio. Director del centro educativo Bustamante y Rivero. Sicuani)



En Lomas de Carabayllo, se registra según datos del censo 2007 que entre las edades de 10 a 14 años existen 93.1% de adolescentes que declararon no haber trabajado la última semana anterior a la ejecución del censo 2007, lo cual detalla que el peso del trabajo se halla en los siguientes grupos etarios o que la informalidad del trabajo no consigue evidenciar el trabajo adolescente existente.

Asimismo según estimaciones del Sr. Juan Rivera se registra que un 12% de alumnos en edad escolar que trabajan y estudian en la zona de intervención. Por otra parte, se registran que existen alrededor de 10% de adolescentes entre las edades  de 15 a 19 años que no trabajan ni estudian. Según testimonios en Lomas de Carabayllo desde tempranas edades se trabaja para ayudar al hogar, se trabaja y estudia con mucha dificultad y existe un porcentaje importante de jóvenes que no trabajan ni estudian. Los trabajos son oficios, reciclajes, trabajo en las ladrilleras o en construcción

“El problema es que no teniendo la edad suficiente ya cuentan con una responsabilidad económica dentro del hogar, entonces les piden permisos a los profesores, no cumplen las tareas, dejan de estudiar, y se descuidan de los estudios. Nosotros orientamos a esos alumnos, porque el niño y el adolescente requieren la protección tanto de los padres como de los maestros” (Segundo Huaracc. Docente de Manuel Scorza. Lomas de Carabayllo)


En RDA, se reportan según datos del censo 2007 que un 97.6% declaro no haber trabajado la última semana anterior a la ejecución de censo, en las edades de 10 a 14 años, número que señala el ocultamiento del trabajo infantil o adolescente, que mayormente es de naturaleza informal. Asimismo, se recogen estimaciones relacionadas a adolescentes que trabajan y estudian en el rango de edades de 10 a 14 años en el colegio 7100 que alcanza a 3 por cada sección.

A su vez se recoge el dato de que alrededor de 20% de adolescentes entre las edades de 10 a 14 años no trabajan ni estudian. Estos dos últimos datos resumen la precariedad de la vida de los adolescentes en al comunidad, teniendo que trabajar, o contrariamente en las calles si asumir una posición positiva a cerca de sus vidas.


Planes de vida.


Se entiende por plan de vida el conjunto de proyecciones personales en el tiempo que elabora la persona con el propósito de conseguir un objetivo en relación a plazos y metas. Es decir, en el caso de los jóvenes un proyecto de vida ha de significar las expectativas que desea para sí mismo y como organiza sus cualidades y recursos personales para llegar a esa meta, sin desviarse de ese proceso por las malas influencias y la pobreza social. En caso consiga sobreponerse a las limitaciones de su medio es un actor que posee resilencia, es decir, que es capaz de superarse y lograr el desarrollo personal, creando liderazgo y asumiendo un papel protagónico en sus comunidad. (VARGAS: 31: 2005)

No obstante, saberse este camino, en la mayoría de los casos los actores de los sectores urbano-populares, no cuentan con proyectos de vida, y mas la juventud, que vive el presente y se halla sin orientaciones, y sin oportunidades que aprovechar para escapar a la transmisión intergeneracional de la pobreza.

Es muy difícil conseguir que un adolescente se piense en la larga duración, extraer sus expectativas y haberse hecho una idea de como progresar o que desea para sí mismo en el futuro, siguiendo un conjunto de pasos previos; por lo general predomina el desperdicio de su tiempo, y la práctica de hábitos que disminuyen su personalidad, y lo envuelven en el ciclo de la pobreza social.

En Sicuani, alrededor del 50% según testimonios del director del colegio Bustamante y Rivero, los jóvenes  poseen y elaboran de sí mismos un proyecto de vida, chicos con una definición clara de lo que piensan a futuro. Hay un porcentaje de alumnos que  vienen al colegio porque son obligados por sus familias, viven el día a día, y si no  tienen para comer o estudiar no se hacen problemas. Y este problema, se origina en los padres que no saben guiar a sus hijos ni estimular en ellos la superación personal; estas poblaciones provienen de los hogares hacinados o de inquilinos que están de paso.

“En la escuela muy poca importancia se le da, los profesores muy poco y a nivel de alumnos casi el tema es 0 y hay que el trabajo de proyecto de vida es escaso hay jóvenes que si tienen definido y da gusto hablar con ellos, hay mayoría de jóvenes que te dicen que vienen porque su mama les manda o porque si no les castiga, no tienen un motivo el porque estudian y que van a ser en el futuro. Y eso determina que un joven que no tiene aspiraciones como que lo que le enseñan no tiene sentido y eso es un error de los padres” (Raúl del Carpio. Director del centro educativo Bustamante Y Rivero. Sicuani)


En Lomas de Carabayllo, se observa según testimonios la dificultad de que los jóvenes no posean proyecto de vida, es decir que no sepan que van hacer en el futuro con sus vidas, debido a los hogares disfuncionales que no les estimulan a progresar y al caso de las madres precoces que prácticamente se truncan su desarrollo. Un rasgo saltante que se señala es la presencia de Fuerza juvenil y el trabajo de otras organizaciones sin fines de lucro como Plan internacional y Pukllay que vienen trabajando en la recuperación de los jóvenes y adolescentes por medio de la animación sociocultural y actividades artísticas.

“No. Digamos que unos cuantos, la mayoría no, por eso vienen los embarazos precoces, los pandilleros, no saben cómo proyectar su vida para adelante. No saben qué quieren ser. No saben lo que es un proyecto de vida, porque yo les pregunto a mis amigos qué quieren ser y responden a modo de burla que quieren ser chatarreros o algo así, pero no tiene idea de un plan de vida” (Sletter Espinoza. Miembro de Fuerza Juvenil. Lomas de Carabayllo)


En RDA, según estimaciones del Sr. José Fajardo son 40 jóvenes entre las edades de 14 a 18 años que poseen proyecto de vida, representando este número alrededor del 5% del total de jóvenes de la zona de intervención del RDA. En esta comunidad existen elementos juveniles que si poseen resilencia al medio cargado de violencia y delincuencia juvenil, como el que  habla en el testimonio Mirko Taboada, alcalde escolar del colegio 7100, y otros valores juveniles que se las arreglan para seguir estudiando y progresar.

“Los que piensan realmente en su futuro saben lo que quieren hacer más adelante como ingresar a la universidad y tener un buen trabajo y casarse y cumplir sus metas. Y los que quieren salir adelante salen de los baches que les quiere hacer truncar sus vidas” (Mirko Taboada. Alcalde escolar del centro educativo 7100)


Acciones de la comunidad


En Sicuani, se afirma que existe un trabajo importante, aunque inicial con jóvenes y adolescentes a raíz de la iniciativa del director del centro educativo Bustamante y Rivero Raúl Del Carpio, los docentes y el movimiento religioso Juan XXIII de trabajar con la comunidad en aquellos hogares difíciles con problemas de violencia, desentendimiento de los padres y fracaso escolar, para así combatir la drogadicción, el alcoholismo y problemas de negligencia de niños y adolescentes por parte de los padres de familia.

Que esta trabajando mas en los grupos difíciles es el movimiento Juan 23 porque ellos entran a esos hogares ese movimiento jala a los padres drogadictos alcohólicos y a eso hay que llegar entonces es un espíritu solidario yo soy de Juan 23 y tengo un vecino pegaron y tengo que convencerlo en llevarlo a ese retiro así hay un compromiso entre todos ellos para poder seguir trabajando, y así entran a tallar a los hogares. También hay otros movimientos religiosos que hacen congregaciones religiosas, pero mas es ese lado. (Raúl Del Carpio. Director del centro educativo Bustamante y Rivero. Sicuani)

En lomas de Carabayllo, se menciona que el trabajo con adolescentes en riesgo de fracaso escolar se concentra en los centros educativos, en actividades de algunas organizaciones sin fines de lucro como Pukllay, y actividades de organización de fulbito que realiza la municipalidad. Se observa el carácter cerrado de los colegios en el trabajo con la comunidad, para prevenir desde el hogar estos riesgos de fracaso escolar.

“…o que está haciendo la municipalidad, (porque el grupo vecinal o la comunidad no tienen muchos fondos), son los talleres de fulbito. Han armado escuelas de fulbito, danza, reforzamiento académico. La comunidad puede organizar algunos campeonatos pero no son muy concurridos, porque, como repito, no tienen muchos fondos” (Sletter Espinoza. Miembro de Fuerza Juvenil. Lomas de Carabayllo)

En RDA, el trabajo de la comunidad hacia los adolescentes y jóvenes es embrionario y se halla obstaculizado por el carácter cerrado del colegio 7100 hacia la comunidad, que sin embargo hace actividades socioculturales con la comunidad, y   por la distancia entre los grupos etarios adultos, y sus dirigencias populares hacia los adolescentes que integran las pandillas.

“La institución influye en algunas cosas con la comunidad como por ejemplo todos los profesores quedaron en dar una marcha por día del planeta y son algunos profesores que hacen esto. A fin de año los profesores juntos con los alumnos van a apoyar a las familias muy humildes en la cima del cerro y eso es lo que hace el colegio por la comunidad” (Mirko Taboada. Alcalde escolar del centro educativo 7100. RDA)




[1] Organización que trabaja con jóvenes en animación sociocultural y arte
[2] No se pudieron recoger estimaciones de los colegios Manuel Escorza y Juan Pablo II

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