Me acuerdo unas historias allá en mi barrio cuando era tan inocente, que si no pagaban una apuesta de pelota, el equipo contrario tenia que pasar callejón oscuro o habia trifulca. Pero en si no me daba cuenta de cosas que luego serían mas una realidad, solo por estar practicando mis efectos con mi pie diestro y jugar mi nintendo de moda.
Habia un señorito, ya de unos cuarenta años que se vestía con ropas muy féminas para mi costumbre. Vivía recuerdo por Coronel Zubiaga solo,. o sola con su padre, ya un anciano y laboraba en una peluquería en la Av. Grau. Siempre que pasaba los chibolos ya mas grandes y avezados lo jodían de rosquete, y que se amarre la cuestión con gutapercha para hacerse mas mujer... Yo no entendía nada, pues vivía en la inocencia de jugar con la "U". Me acuerdo que en Carnavales lo agarraban a globazos por todos lados y el o ella soltaba sus gritos a lo Fulvio Carmelo y se sentía hasta honrado que lo jodieran de esa forma. Mas allá de llamar la atención de esa forma, no le conocimos algún escándalo y si era un tipo amigable y respetuoso de los vecinos y vecinas.
Pero asi no pensaba un padre huraño y con caras de pocos amigos cuando el o ella iba a misa a expurgar sus pecados, y al confesarse lo botaba y ante todos fuera en el atrio le grito un dia que "el era una oveja descarriada". A lo que respondió él o ella... "Oveja no padre, chiva y de las locas" Y todos se empezaron a reír de ese padre que era un déspota.
Un buen dia cuando ya hacia catecismo y las cosas del señor me empezaron a interesar, y hasta lloraba viendo las peliculas de la semana Santa, ese padrecito con lentes y siempre con sotana le agradaba qiuedarse hasta tarde con los niños y sobre todo niñas mas señoritas. Una tarde, ya media caida del sol mientras cogia con mis manos arañas de patas largas y las destripaba, escuche decirle a una chica que venia a comer algo a la parroquia, que habia que quitarle el diablo del cuerpo--- Y como padre--- Tu confia desnudate que te rociare de agua bendita----
Yo que sabia a donde iba eso, solo sentí un ligero gemido y me salí hacia el atrio, a seguir destripando a mis arañas de patas largas, cuando una adolescente salio despavorida y toda llorosa del salon donde se hacia la Tombola---- Solo recuerdo que el padre se encerro en la sacristía y en diez minutos unos bravos de Santo Cristo con cohete en mano lo buscaron. Rompieron la puerta y lo sacaron al padre mañuco al atrio dando a la plaza, y le dieron una golpiza de padre y señor mio, que hasta una ecuación le marcaron en el rostro por pendejo. Todo el mundo de la plazuela del Cercado no dijo nada.
Ese padre desapareció del Barrio, y nadie comento nada, ni en las noticias salio su Divina Comedia... Solo recuerdo que un amigo me contó tiempo después que vivía a todo lujo en el Vaticano, en una celda purgando para siempre sus pecados o viendo vídeos dela Chicholina.... Plop
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