Unas rolas para una musa

 Tengo una amiga muy bella que no veo hace diez años. Siempre me hubiera gustado que fuera más que una amiga, pero ella era una mujer casada y fiel. Con el tiempo a pesar de mis intentos inapropiados de que fuera mi amante ella quedó encinta de su marido, y decidí no volver a molestar. Con ella no solo compartia mis piropos o acometidas nada elegantes, sino que me llegó a conocer con mis virtudes y miserias, mis vulnerabilidades y fortalezas. De cierta manera si me hubiera dado zajiro era seguro que una desilusión hubiera provocado una infeliz discordia. La respetaba como una genial empresaria y más cuando no tenía dinero me pagaba las meriendas y los tragos. Éramos chocheras pero yo más que nadie hubiera querido morder esas enormes piernas blanquecinas que se manejaba.

Cuando viaje más seguido deje de verla y me enrede con el corazón de otras mujeres. Y cuando nos veíamos su sonrisa halagueña y sincera era imposible no ser comparada con la hipocresía y falsedad con la que me encontraba en todas partes. Me hubiera gustado que su magia de mujer hubiera acompañado un amanecer juntos. Pero la realidad es que nuestro Jesús al cual ella se encomienda, la protegía de mi grandilocuente lujuria. Ella jamás me juzgo o me solto una ofensa, pero se que si fuera mi mujer no tendría la fuerza que ella si demuestra en todas partes.

Ella es una empresaria. Prácticamente ella comanda sus negocios y su esposo y sus empleados la secundan. Pero sino estuviera ella al frente nada funciona. No estoy para contarlo pero el marido es una buenísima persona y un gran padre pero es precario y faltó de carácter. No tiene la más mínima idea de como conducir una empresa. Y a pesar de esa flaqueza ella carga con el, pues es el padre de su hija. Es una gran madre hasta lo que se. Y le encanta cantar con el matiz de una voz rockera. Solo la he escuchado por redes. Hasta ahora no he gozado de su voz melodiosa y como anima el ambiente de discotecas y reuniones 

Ciertas veces me confesaba que en búsqueda de capital para su empresa se entrevistaba con posibles socios, que a cambio de su dinero le proponían encuentros furtivos. Ella todo asqueada le hubiera gustado ser hombre, pero ella es la más bella empresaria de Miraflores. Y yo sienpre se lo recuerdo. Desde que es madre deje de verla y en el lapso de diez años donde he estado deambulando por el Perú en búsqueda de una respuesta a mis preguntas existenciales no he vuelto a verla. Creo que ella a pesar de su religiosidad y su devoción por Jesús se me ha hecho alguien inalcanzable. Está mal que lo diga pero ella es un fuego que lo ilumina todo y a escondidas ya no soy capaz de quemarme con su piel. Ahora se que es un solista de rock  con su propia banda, y que alegra con su melodiosa voz las noches con el rock ingles. 

Algunas veces pienso que he conocido solo la parte buena de ella. En dos sueños que las plantas me muestran la he visto dándome la espalda y eso es lo que ahora me frena para volver a verla. Deseo conocerla otra vez pero mi deseo por qué este a mi lado es tan fuerte como la desilusión que me daría no tener la fuerza de varón para saber llevarla. Se que le gustó pues he hecho muchos favores y le he dado la mano cuando la he sentido quebrarse. 

Ella en su perspectiva de ampliar su negocio a Cuzco fue estafada por una mujer ex amiga suya que se ha valido de trampas y justificaciones odiosas con tal de hacerse con el capital para abrir una sucursal de su empresa tan esperada por mi amiga. Se ha valido hasta de brujería para apoderarse de lo que no le pertenece . En su desesperación mi amiga estimada me llamo por celular y contándome está situación me confio que la habían amenazado. 

Lloraba tanto y quería estar a su lado , pero lo que atiné fue llamar a unos lumpenes amigos míos para asustar a esa traidora y le di el contacto de un shipibo maestro sanador para que le quitará el daño de brujería y la repotenciara. Así lo hizo y en cuestión de dos meses ya era otra. Logro recuperar su ánimo y su alegría y ahora aunque no le veo se que es feliz. Desearía estar con ella pero las dudas me atormentan. El maestro Hernán siempre me dijo que al sanarme de mi alma debía dejar el pasado atrás, y ella es parte de mi pasado. Se que soy duro conmigo mismo y me estoy perdiendo a una gran mujer, pero no tengo el valor para mantenerla a mi lado. Ella al parecer se siente atraída hacia mi, pero en mis oscuridades no se cómo lo tome ella. Yo solo curo con el cuerpo, pero yo quiero quemar su alma con mi  fuerza. Pero todo esto es pasión y no realmente amor. Aún no se lo Que es amar.

Mientras dudo en volver a verla, y tener un pretexto para apachurrar la con un abrazo interminable me conformo con recordar sus risas y sus ojos, y soñando que es mía a flor de piel. Se que no es la realidad, pero a veces la vida es sueño y hay que saber despertar. Espero volver a verla pero en otras circunstancias; de paso la halago con poesía en redes y doy rezos a Jesús para que no le falte nada y lo logre todo. Yo sigo siendo un caminante que camina