Cuando hui de un cachaco

 

Ya me llevaba telefoneando con ella dos meses. Sabia que se llamaba Angelica y que vivía en Ica. Ya había cierta confianza pero no dejaba que la visitara. No sabia porque dándome sajiro no dejaba que nos encontraramos al fin. Estuve revisando su perfil en el face al cual me agrego y pude comprobar que además de ser muy bella, la razón de porque me evitara. Tenia enamorado y era militar.

A pesar de eso seguía insistiendo en verla aunque sea  escondidas. Ya le había dicho que sabia que tenia enamorado y era cachaco. y que realmente no me importaba. Por fin accedió y me dijo que trajera mucho vino pues era su debilidad.

Llegue a Ica luego de chapar el Soyuz en seis horas a Ica, y me hospede con mis chivas en un hotel céntrico con un cuarto que daba a la plaza de armas. Ella no me recibió en el terminal de buses a pesar que le conté que llegaba un domingo. Solo me comento que se escaparía y podríamos conocernos ya que su cachaco estaba guardado en el cuartel.

Nos vimos en la plaza de armas y después de esquivarme veces accedió a subir conmigo a mi habitación pero solo como amigos. Algo la tenia preocupada y yo presumía que fuera el cachaco un celoso de esos enfermizos. Averigüe cual era la razón y supe que el cachaco era posible que saliera de su guardia esa noche.

Le dije hay que apurarnos pues y le di a tomar vinos que había comprado en San Vicente de Cañete. Iba todo bien, hasta ella se iba deshaciendo de sus prendas y se ponía muy sensual. De las miraditas y risas pasamos a los arrumacos y a la caricias deshinbidas y fui desnudándola sin mas respeto.

Hicimos el amor como salvajes aquella tarde sin percibir el peligro que sobrevendría. No se como pero el cachaco tenia un soplón que  le avisaba de los movimientos de su chica. Cuando todo iba mejor y ya era mía sentimos escaramuzas en el vestíbulo del hotel. Luego alguien venia subiendo.

Sospeche que era el cachaco y antes que me viera con un plomo en el pecho agarre mis chivas me vestí como pude y  me descolgué del segundo piso a la calle. Ella estaba  mareada y yo como si nada. ;Me logre escapar y pude sentir un plomazo que recorrió el esqueleto. Había fallado. Chape un mototaxi y le pedí me alejara lo mas posible de la plaza de armas.

De pronto me halle en plena carretera sano y a salvo. Tome el primer bus que fuera a Lima y olvide a Angelica desnuda en aquella habitación. Solo supe de ella tiempo después cuando el cachaco me llamo por teléfono y me amenazo de muerte. De ella solo recuerdo las delicias de ese cuerpo y esa desenvoltura para arriesgarse ante la amenaza de un novio celosos

A pesar que era un cachudo  se caso con ella. Lo supe tiempo después por su perfil de ella. Cuantas veces se la habría hecho al pobre cachaco.