domingo, 19 de septiembre de 2021

El fin de un lujurioso

 




Esta anécdota me la contó un amigo que sufrió de la próstata. Me contó que en uno de sus viajes al sur chico, se hospedó en un hotel de San Vicente de Cañete, para coordinar su trabajo en la zona. En las noches mientras trabajaba en su laptop escuchaba los gémidos exagerados de las mujeres haciendo el amor con sus parejas. En parte no le dejaban concentrarse en su trabajo ni a la hora de dormir. Eran tan exagerados estos gemidos que se escuchaba a las camas azotarse contra el suelo y escucharse frases eroticas subidas de tono.


"No dejaba de ser risible y a la vez molesto las diversas formas de gritos y sonidos de los catres que escuchaba cada noche. Yo intentaba concentrarme pata trabajar unos pendientes en mi laptop o intentaba dormir y era casi imposible. Hasta envidia me daba no ser uno de los hombres que tiraban esas hembras.

Cuando salía a trabajar al campo y hacia mis entrevistas y talleres me olvidaba que no había dormido bien y me relajaba los fines de semana. Cuando regresaba al hotel de los gélidos me quedaba en el lobby del hotel a conversar con la conserje del hotel y reíamos de las cosas que pasaban en aquel lugar. Me decía: " me piden el condon con espuelas".

Hasta que una noche llegaron siete ángeles. Eran una familia de hermanas, primas y padres que llegaban procedentes de Lima en una vagoneta negra. Habían hecho parada en Cañete para ir en dos días  Lunahuana de paseo. Esa noche era viernes, se registraron y luego de cruzar miradas conmigo, los padres y un bebé chillón subieron a habitaciones en el segundo piso, y unas cinco chicas se hospedaron en una habitación del primer piso, muy cerca a mi cuarto. Luego que se instalaron se oyeron sonidos y murmullos en el zaguán y eran las chicas lindas y emperifolladas,  listas para matar en una discoteca. Sentí un olor especial en el ambiente era marihuana. Las bellas mujeres estaban fumando de la buena.

Se colaron por las calles seguro a alguna discoteca de San Vicente de Cañete. Yo esa noche me dije, porque no perseguirlos y levantaremos a una de ellas, pero luego me decía era mejor descansar, pues las molestias urinarias eran ya difíciles de controlar. Tomaba mi calmante pero vada vez era más ineficaz para contener el ardor en la uretra.

Me metí a la habitación a descansar. Eran como las 2 de la mañana y yo en ropa interior, me dispuse a bañarme. Cuando de pronto oí sonidos de risas y alboroto en los pasillos del hotel. Abrí la puerta desnudo para saber que pasaba y eran esos ángeles que llegaban ebrias y drogadas. Seguro habían tenido su tono y ya era hora de dormir.. cerre mi puerta rápidamente cuando a los cinco minutos sentí un ligero toque do en mi puerta. Me asome y era una de ellas pidiendo que la ayuden que un barbajan no las dejaba en paz en su cuarto. Me puse un polo y sin pantalón me dispuse a expulsarlo del cuarto de esas chicas.

Cuando entre no había tal hombre solo cinco chicas en ropa interior viendo por o en televisión. Cuando entre cerraron la puerta. Y una de ellas me dijo: " Ests noche tu eres el indicado para satisfacernos Muéstranos tu cosa a ver si nos sororendemos". Me iba retirar e hice el ademán de hacerlo pero entre las cinco me aventaron a la cama y se me puso como un fierro apesar de las molestias. No se como en un santiamén entre las cinco chicas me la xhupaban hasta la sociedad y lleno de deseo quería matar con ellas pero solo se aprovechaban de mi pene.

Sentí mientras el placer me embargaba que las molestias urinarias eran grandes me libere de ellas y cuando estaba a punto de eyaculat una de ellas, pronunció hay sangre. Eyacule semen con marchitas de sangre. El dolor empezó a apoderarse de mi y me escape calato a mi cuarto, mientras las chicas gritaban, ya no es hombre ese pobre huevon.
Me bañe lo mejor que pude y el sueño se apodero de mi. En la mañana agarre mis chivas  y tome mi zoyuz a Lima. Tenía que ir al doctor a saber que pasaba.  Llego el día luego de muchas molestias, y me dijo que tenía la próstata inflamada. Que debía tomar antibióticos y desinflamantes.

Yo tenia que seguir trabajando en el sur. Pero cuando dijo que la cosa era cronica me asuste y decide probar suerte con la medicina shamanica. Me averigüe el nombre de tres curanderos amazónicos y luego de hacer un buen dinero viaje e Pucallpa. No sabía el infierno que me esperaba no el daño mental que tenía que soportar en estos años. Pero esto son retazo de algo más grande que contaré luego"

jueves, 5 de agosto de 2021

Hace años en Ayabaca.





Una vez un amigo me contó una historia algo disparatada. El con dos ingenieros se fueron al distrito de Ayabaca en Piura a hacer un trabajo a cargo de una empresa de influencia. Mientras hacían el levantamiento de información pasaron por los comercios de la pequeña ciudad y vieron que en una tienda de ropa deportiva atendían dos muchachas muy bellas


Se atrevieron a entrar y entré los tres las convencieron para salir a tomarse unas chelas. Claro les advirtieron que eran casadas recientemente y que sus esposos eran militares y dueños de ese comercio. A mis amigos no les importa tal prohibición y ya por la noche estaban departiendo cervezas en el hotel donde se hospedaba. Como era el último día de su chamba y solo tenían que hacer el resto en trabajo de gabinete en Lima, se empezaron a tomarse unas bombas alcohólicas con las dos muchachas y una más que habían invitado. De pronto empezaron a chapar con total desparpajo en el restaurante del hotel a vista y paciencia de los comensales. Uno de ellos horrorizado salió sigilosamente del lugar y de inmediato se escucharon en la calle rumores de un gentío que llegaba.

Esa persona que había salido cautelosamente era conocido de uno de los esposos, y el ruido era de una muchedumbre que con palos venían a linchar a los jóvenes.

Las chicas se dieron cuenta del peligro y con ayuda del tendero del hotel salieron por la parte trasera del hotel , no sin antes dejar celulares a sus nuevos amantes. Cuando ya estaban en la calle corrieron al terminal de la ciudad y se embarcaron para Piura a tomar su vuelo hacia Lima, con las justas. Tiempo después uno de esos ingenieros se caso con una de esas muchachas y las otras dos salían a encuentros íntimos cada vez que mis amigos visitaban el norte de país. No salieron linchados, ni brujeados. 

lunes, 17 de mayo de 2021

Algo sobre mi abuela.

 



Mi abuela es una mujer de carácter alegre y deshinbido. Apesar que siempre ha soportado los rigores de la pobreza nunca la he visto asumir su vida como una tragedia. Ella es para mí un consuelo y una energía de mujer que en mis crisis existenciales ha sabido apoyarme  y sacarme del abismo con su positivismo. 

Nunca tuvo una vida fácil. Era hija engreída de mis bisabuelos y desde muy joven quedo embarazada de dos niñas. Una de ellas la mayor es mi madre. Tuvo  que migrar a Lima en los 50s con mi tío abuelo Victor y mi bisabuela. Nunca tuvo estudios pero el hecho de que siempre fue la engreída de su padre le choco para adaptarse a la realidad de la supervivencia. Así con todo supo sacar a seis hijos y luego a un séptimo hijo, mi tío Miguel.

Luego de tener a mi madre y a mi tía abuela se conoció con mi tío abuelo Juan. El desde su humildad y caballerosidad se hizo cargo de mis tíos y tuvo con mi abuela cuatro hijos. Entre ellos mi finada tía Eleana, que se convirtió en mi segunda madre. Es una lástima que se enfermara de cáncer a la sangre y que desde las rejas del 2 de Mayo, le pedía a mi madre que cuidara a sus hijos, ya que lo que tenía era mortal. Fue muy triste para mí abuela la partida del tío Juan , pero aún así pudo sacar adelante a sus hijos,  pese a los abusos y la crueldad de su hermano, que siempre le reclamaba que se haya llenado de hijos. 

Pasaron los años y mi abuela seguía siendo una mujer muy bella que no aparentaba su edad. Mis tíos crecieron y muchos de ellos se volvieron profesionales. Mi madre se caso y luego acogió en mi casa a mi finada tía Eleana, que fue mi segunda madre.  Muchos de mis tíos hicieron sus vidas y mi abuela empezó a sufrir de nuevo miseria. Dejaron los Barrios Altos y llegó a las Torres de Limatambo. Luego por una disputa entre hermanos se mudo a la ciudad satélite Santa Rosa y luego a la casa de una de mis tías.

Con el tiempo mi último tío Miguel empezó a trabajar y junto con las ayudas de los hermanos sacaban adelante a la abuela. Mi familia se mudo a Surco, cerca de la casa de mi abuela. Siempre la visitaba y trataba de que perdiera esa actitud dramática y a la vez preocupada que demostraba. Su calor y confianza siempre han sido para mí una energía que me ha regocijado y dado esperanza. Aunque hay reconocerlo la familia de mi abuela no es muy unida y hay disputas ridículas, cada uno a su manera han ayudado a mi abuela.

Ahora aunque ahora esta luchando por su vida, yo prefiero recordarla como una dama cantante y positiva que siempre aplaudía mis azotes de bailarín e intelectual desorejado.  Mi abuela se hace querer a donde quiera que vaya, y no puede permanecer en su casa encerrada. Ama el aire de la calle y estar de aquí para allá haciendo amigos. Incluso se va hasta a Huaral a visitar a sus primos de sangre. Yo no se de donde saca tanta energía, solo se que yo la quieto tal como y prefiero recordarla ahora que no la veo hace más de un año, es con su sonrisa halagüeñas y sus cabellos blancos y con una sabiduría de la comida y de la vida que siempre he sabido destacar en mi abuela.

Ahora que esta enferma y no puedo visitarla un dolor muy grande se apodrra de mi corazón. Este virus maldito me ha llevado de una parte de mi familia a la que tanto quiero. Lo lamentable es que mi abuela falleció hace algunos días atrás, y lo que me deja es una gran frustración por no poder ayudarla y estar junto a ella. Jamás volveré a ver los cabellos blancos de mi abuelita Maria. 

jueves, 29 de abril de 2021

Mis dos madres.

 



Yo nací casi por casualidad. Mi viejo iba ser médico en Arequipa y luego decidió viajar a Lima en búsqueda de un futuro. Y la que es mi madre deseaba ser monja o viajar a los Estados Unidos. 

Mi madre es una señora muy bella chapada a la antigua y tremendamente obsesiva con el orden y la limpieza. Ella nació en Caja marca pero se crío en Lima en los Barrios Altos, hasta se juventud y parte de su vida adulta. Ella es muy cariñosa y no deja que la ayuden en los quehaceres de la casa. Como dice ella " esta es mi casa, nadie mete las manos en ella". Apesar que termina muerta por el trajín que hace todo el día, ella es coronel en su propia casa.

Ella me transmitió valores como la solidaridad, la honestidad, la disciplina y que sea responsable con mis tareas. Mi madre siempre se ha rajado por nosotros. De ser una vendedora de calzado en las tiendas Diamante del centro, paso al hogar a ayudar a mi tía Cuca, mi segunda madre. Siempre todas las navidades me traían mis regalos y juguetes, y me armaban con pirotécnicos de lujo que los hacía estallar en Navidad y año nuevo.

Gracias a mi madre Esther yo me introduje en la lectura desde muy niño. Ella con mi padre me regalaron enciclopedias y cuentos que yo devoraba rápidamente. Es así que me las pasaba los días leyendo las mil y una noches y las tradiciones peruana. Tenía también libros de la segunda guerra mundial y el diccionario de Espasa Calpe. Ella siempre lava mi ropa y me consiente con sus platillos caseros. Y en cierta medida es la responsable de que este subido de peso.

Mi madre Esther siempre quiso estudiar enfermería en la universidad o irse a los Estados Unidos a trabajar. Ya de muy niña cuidaba a sus hermanos y sus primeros sueldos en la zapateria de chinos los destinaba a comprarle ropa a sus hermanos y electrodomésticos para mi abuela Maria.

Antes, cuando era un adolescente la sorprendía con un poema en su casa o una composición florida que le recitaba. Recuerdo cuando enfermaba de mis amígdalas me llevaba al Doctor Suarez, y siempre me cuidaba. Teníamos gatos y ella no les gustaba. Me recuerdo que cada vez que barría el gato se trepaba a sus piernas y jugaba con mi madre. En las fiestas de fin de año mi madre me sacaba a bailar salsa. Y ella fue la responsable que tuviéramos mi hermano Fernando y yo una educación de calidad en el Colegio Lasalle. 

Mi madre Esther no ríe así no más. Es maniática de la limpieza. Y hoy en día por el miedo al virus lo es más que nunca. La quiero demasiado porque siempre en mis momentos complicados estuvo ahí conmigo aconsejandome y levantándome el ánimo. Ella es la responsable que ingresara a San Marcos. Pues siempre quiso que yo fuera alguien importante. Algo que hasta ahora no cumplo, pero lo haré. 

Mi otra madre partió hace ya casi quince años. Ella Eliana o la cuca como le decíamos mi hermano y yo era muy renegona pero nos quería como a sus propios hijos. Ella vino a vivir con nuestra familia desde que yo era un bebé. Y cuando mi madre Esther tenía que trabajar cuidaba de nosotros y de la casa. Siempre que eran las seis o las siete nos gritaba a mi hermano Fernsndo y a mi, que nos metieramos a la casa pues el lonche nos esperaba y ya era muy tarde. Le gustaba hacer el mercado y tejer en sus ratos libres. Recuerdo cuando venia mi tío Victor chico a la casa le decía Minora y ambos veían comedias y telenovelas.

Mi tía Eliana amaba los gatos. No era solo por los ratones que los teníamos, sino porque a mi tía le gustaba criar gatos mimosos. Me recuerdo que el último gato que tuvimos aquí ya en Surco, que era un gato que se mechaba con los perros, un día desapareció para no volver jamás. A mi madre cita Cuca rompió en llanto. Y de ahí no tuvimos más mascotas en la casa. Ella era una gran cocinera y nos chupabamos los dedos con su comida.

Es una verdadera tragedia que desarrollará dos tumores en el cerebro. Recuerdo que por esos días yo entrenaba en el gimnasio y de lo triste y con bronca que estaba por la salud de mi tía, le busque pelea a dos agarrados como yo. A los dos les saque el ancho. No por ellos sino por la rabia que sentía de no poder hacer algo por mi tía. Un día la internaron en el Hospital 2 de Mayo e ingreso para nunca más volver a su hogar. Resistió una primera operación al cerebro, pero tenía que ser estabilizada para intervenir por el segundo tumor. Mientras en la madrugada dormía le dio un paro cardo respiratorio, y a pesar que mi tía Betty cuido de ella mi tía murió, y me dejó un sabor amargo en el corazón.

La noche que mi tío Tato y mi tía Betty vinieron a avisarnos que mi tía madrecira bella había muerto a las doce de la noche, mi madre y mis hermanos rompimos en llanto. Aún cuando la vi echada en su sofá comiendo su helado, me dijo que yo estudiaría mi maestría. Que ella no importaba. Pero si importaba pues toda mi niñez y adolescencia me las pasé con ella y sus cuidados y postres. Ella era de un amor incondicional, la que entregaba todo por sus sobrinos. Le gustaba el cafecito con su queso caliente. Y siempre veía novelas en la TV. Desde las novelas venezolanas hasta las brasileras. 

La extraño mucho a mi tía. Siempre con su sabiduría basada en el amor me enseñó sobre la solidaridad y la entrega a mis sueños. Ahora que no esta ha dejado un gran vacío en mi corazón. Ambas mi madre Esther y mi Cuca han sido lo más bello que me pasó en mi formación. Sin ellas hubiera sido un maleante o nunca me hubieran gustado los estudios. Siempre le oro a mi tía para que desde el cielo donde esta sea intercedor con el jefazo por mi. Ahora que han pasado quince años de su muerte la recuerdo en Barriod Altos con su sonrisa de niña y el pan francés calentito. Tus adoradas tus palabras han quedado en mi mente. 

sábado, 10 de abril de 2021

No predicar con el ejemplo




Una vez Rolando salía de su hogar en los Barrios Altos rumbo a su universidad donde estudiaba Derecho. Se hallaba en su primer año de estudios y las buenas notas no lo acompañaban . Lo curioso era que el era empeñoso y pronto detecto las utilidades de ser abogado. Se dio cuenta que hablaba muy bien y que podía ser un líder que podría representar a sus amigos lúmenes de su barrio. El mismo había participado en unos asaltos a mano armada pero ahora quería dejar esa vida y aprovechar los estudios para ser un gran profesional.


Un buen día iba en microbus a la universidad y se sentó junto a él un padrecito mucho mayor que el. Veia que leía con insistencia un libro estampado de reojo y que cada vez que leía algo interesante se tocaba la cabeza y asentía de una forma por demás ridícula. Rolando curioso se presentó y le preguntó que era aquel libro. .

-- Muchacho debes saber que es el mismísimo Lenin que me habla y que la lucha de clases es el motor de la historia y que nosotros somos el proletariado que esta dispuesto a luchar por la revolución mundial. ..
-- Y ¿ donde quedan mis amigos rateros y la gente de donde vengo?
-- ellos son el lumoenproletriado gente que pertenece al ejército de reserva industrial. Gente que no sirve y que no entiende de conciencia de clase.

Rolando escuchaba atentamente lo que decía aquel señor, aunque por dentro quería darle un puñetazo. Se daba cuenta por sus gesticulaciónes que era alguien perturbado y fanático. Así que decidió respetarlo y esperar a ver que sacaba para sus amigos lúmenes. El señor lo invito a una de sus reuniones políticas en el centro y luego, porque tenía prisa de bajar se despidió de Rolando.  El joven pensó que podría sacar de alguien que a leguas se ve que es un adoctrinados. No lo pensó más y llegó a la unuversudad donde lo esperaba el conocimiento y sus amigos.

Cierto día que también se dirigía a la unuversudad se sentó junto a él otro sujeto más emperifollado y con unos aires de rey que resaltaban su mirada algo estirada y con poses de señor mandon. También leía un libro con bastante asuisidad y pronto Rolandi se presentó e intrigado le preguntó de qué trataba el libro.

-- es ^ el llamado de la tribu" de Vargas Llosa, un libro que habla sobre el mercado y los liberales.
Rolando que ya había escuchado sobre los liberales totalmente entusiasmado empezó a escuchar la perorata de aquel caballero.

-- muchacho debes saber que en América Latina debe haber un área de libre mercado sin aranceles y tontas restricciones. Que el que quiera ser libre debe trabajar y ofrecer sus servicios en la leyes del mercado de la oferta y la demanda. Y que aquel que es pobre es por su culpa, por no querer esforzarse. 
-- y que opina de los lúmenes.
-- ellos son una amenaza a la propiedad privada y según mi opinión no debe haber ninguna política pública para ellos, son sólo desechos.
-- pero son seres humanos.
-- si pero son un gasto fiscal innecesario. El mercado debe eliminarlos. No hay como regenerar a los ladrones.

Cuando Rolando escucho, aquellas palabras contra sus amigos quizá vociferar un insulto pero se aguanto por ser un señor mayor. Este caballero bien planchadito le invito a una de sus reuniones políticas y se bajo, pues debía trabajar en su empresa. Rolando siguió su camino hacia la universidad e iba pensando las comparaciones entre ambos tipejos y pudo darse cuenta que ambos desprecian  a los pobres. No tenía necesidad de asistir a ningún lado,  no iba sacar nada para sus hermanos de barrio.

Un buen día esperaba a su enamorada en un restaurante y se iba demorando. Mientras pensaba en ella, vio entrar por la puerta a aquellos maestros del microbus.  Resultaba que eran amigos y estaban algo picaditos,  y lo estaban tanto que no lograron reconocerlo cuando pasaron por su lado. Se sentaron ambos camaradas y pudieron un buen desayuno sin escatimar en el precio de la merienda. Quizás se dijo, escucharé una confrontación de mentes.

Llego su enamorada y pidió unos jugos con sanguches. Tenían planeado ir a la costa verde. Pidió silencio a su chica pues quería escuchar la charla de aquellos caballeros.

-- vamos cumpa a las Cucardas, hay unos lomazos- decía el comunista.
-- esperare comemos algo y funcionamos más que un chiquillo-- mascullaba el liberal

Y mientras se reían de sus lujuriosos palabras y de todos los potos que habían visto en la oficina, la enamorada de Rolsndo decía sigilosamente que asco, viejos de mierda.les gustan las prostituta.

Pronto los viejos mareados salieron del restaurante e iban cantando una melodía de Silvio Rodriguez.  "Días y flores" Rolando y su enamorada salieron bien comiditos y se fueron a la costa verde a caminar. Estaba desierta la playa en aquel abril del 99, y entonces aprovecharon para flirtear. Rolando dijo como un toro" matemos al capitalismo"  y se entregaron ambos muchachos a la pasión.

Pronto Rolabdo se dio cuenta que el farfulleo de aquellos señores solo era puro blufeo adoctrinado,  que en realidad eran amigos e iguales. Solo se entristeció un poco, pues no sacaba nada para sus lúmenes de los ;Barrios Altos.

viernes, 9 de abril de 2021

En el manicomio. Ficciones




Andres tenía un comportamiento huraño e inaccesible. Toda su adolescencia se las pasó jugando pistazos en el Agustino y estudiando en un colegio particular. No era de tener muchos amigos pero era muy estudioso. En todas las materias sacaba buen puntaje a pesar que nunca alcanzó los primeros lugares. Me recordaba que fue premiado en un concurso de cuento que lanzó su colegio y le regalaron un libro de Vargas Llosa ^ conversación en la catedral " y un fino lapicero bañado en oro.


Siempre me contaba que cuando salió del colegio lateaba más de lo necesario absorto en pensamientos extraños e indescifrables. Era tan pensativo que muchas veces pudo morir atropellado pues estaba muy dentro de sí mismo. No tenía hermanos, era hijo único de una familia que lo sobreprotegia como si fuera una joya delicada. Lo matricularon a unas clases de piano, pero nunca asistía se las pasaba jugando Nintendo en Wilson o jugando ajedrez en la plaza Francia. Le costaba comunicar sus emociones y sentimientos más profundos, cosa que lo hacía extraño ante sus amigos por sus largos silencios y su timidez para hablar.

Cuando culminó el colegio no quiso asistir a la fiesta de graduación a pesar que era uno de los consagrados. Se limito a despedirse de sus amigos más queridos y retorno a su casa a jugar fulbito y a enviciarse con los juegos de video. Pronto se volvió un zángano, que no quería mover un dedo en casa. Solo se dedicaba leer novelas y cuentos y a darle duro y parejo al Nintendo. Ya eran épocas de tener noviazgos pero el era muy tímido y prefería estar solo en su cuarto pensando en las musarañas. Muchos amigos lo conminavan a asistir a fiestas,  pero el no iba. Tenía mucha vergüenza de ser flaco, así que para motivarse entrenaba en un gimnasio de su barrio, y pronto su rostro y cuerpo ganaron peso y ya era un joven apuesto con músculos. A pesar de eso, no se resolvía a buscarse una chica entre sus amigos o en el gimnasio. Así que empezó a reprimirse mucho y a ser más inaccesible ante sus propios padres que no llegaban a comprenderlo. 

Ingreso a una universidad del Estado luego de un examen de admisión que lo resolvió papayita.  Cuando conoció a sus nuevos amigos empezó a tomar y  a involucrarse más en los grupos de izquierda. A cada reunión o marcha el iba parejito y pronto empezó a hablar en público y a hundirse en convicciones intelectuales que defendió con vigor ante sus compañeros y adversarios. Era un declarado comunista que se lleno de odio y justificaciones absurdas.  Su carácter empezó a hacerse emocional y violento, y pronto hablaba solo al aire para ensayar sus elucubraciones y abstracciones estúpidas.

Un día se enamoro de alguien. Ella era una compañera alegre y bella de su salón. Pronto impacto en ella su verbo florido y sus declaraciones de líder social. Se veían a escondidas y como legítimos enamorados ante los demás  un poco después. El se sentía feliz y emocionado,  pero pronto sus empalagosos prejuicios y moralismo recalcitrante hicieron que ella se alejara de él o lo viera como un inmaduro. Antes de que terminaran ella le sacó la vuelta, y el reventó de cólera y  lleno de lágrimas.

Llego a sí casa hecho un mar de llanto. Y pronto su actitud silente y sobria se desencajo y la violencia más hiriente salían de su boca contra todos.  Cuando se calmaba volvía a llorar y nadie entendía que es lo que le pasaba. Trataban de hablarle y escudriñar sus motivos pero el carecía de las palabras para comunicarse sin insultar o herir. Se encerró en su cuarto y no volvió más a la unuversudad. Por muchos días no salía, ni comía ni se aseaba.

Un buen día un doctor amigo de la familia aconsejo que lo viera un psiquiatra, pues veía actitudes extrañas en su comportamiento y porque no tenía control de sus gestos. Sus padres lo llevaron al Largo Herrera, y pronto el diagnóstico arrojo que tenía un trastorno de personalidad.  Aconsejaron internarlo, pero sus padres prefirieron atenderlo en su casa. Pronto lo vieron peor,  gritando en su cuarto y poniendo una música tan estridente que pronto fastidio a los vecinos. El colmo vino cuando en una cena de las muchas silenciosas que llevaban, empezó a insultar a su padre y se le fue encima. El reconoció su falta y accedió a que lo internaron.

Llego una noche de Agosto. Era lluviosa y fría. Lo recibió un psiquiatra de turno. Se fue para adentro, se desvistió y se puso la ropa de enfermo con sus babuchas. Le dieron algo para tomar para que se quedara dormido. En la mañana lo instalaron en una de las habitaciones del manicomio del seguro social.  Era caer muy bajo para un joven que recién empezaba a vivir la vida. Lo acompañaba en su cuarto un viejo loco de remate que tendía a desvestirse porque hacía mucho calor.

Cusndo tenían que comer Andres devoraba con avidez los alimentos y luego le enyucaban un cóctel de drogas para tenerlo sedado y tranquilo. Mientras comía un compañero de al lado le decia: " mañana invadimos Chile, mañana invadimos Chile" luego otra loca "quiere que le venda mi ropa esta a precio redondo venga conmigo yo le enseño".

Termino la comida Andres dentro de un mar de dudas y pensamientos absurdos. Y extrañaba a su casa y a sus padres. Solo intentaba estar en su cuarto dormido y sin tener que escuchar el montón de gritos y locuras que se sentían en el ambiente. Un loquito mientras dormía le robo sus jabones y sus dulces que le habían traído los médicos. El veía pero no atinaba a reaccionar. Solo salió al pasillo y veía a un loco que se creía una estatua, pues no se movía y otro serpiente pues se deslizaba por el suelo, y una perturbada joven que se sacaba la ropa ante los hombres, gritando que ella era una prostituta.  La vendedora de la parada ofreciendo su mercadería imaginaria y un loquito como de unos treinta años que trabo conversación con el:

- ¿ que hace aquí jovencuto? ¿ a tan poca edad y atribulado por la locura?
-- yo no soy loco. Me metieron acá porque requiero alejarme de lo que me hace daño.
-- ¿ una mujer?  Seguro que fue una mujer la que lo puso así.
- más o menos.  Y usted ¿ que hace aquí en este antro de olvidados?
-- estrés laboral.  Tuve muchos compromisos y se me torcieron los cables. Mire hasta se me cayo todo el pelo.-  Y era verdad era un hombre delgado  sin cabello, y con unos lentes empañados. Y así conversaron de todo mientras a lo lejos los locos de remate golpeaban las puertas y se escuchaban gritos estremecedores. Las enfermeras iban de un lado a otro con esa frialdad técnica que Andres siempre odio de los médicos.

A veces Andres para no estar aburrido, jugaba ajedrez con varios locos y a todos les ganaba. Una chiquilla se molesto por haber perdido que le escupió en la cara. De inmediato unas enfermeras la llevaron a su cuarto. Durante la cena un negro loco le hacía señas con la lengua asquerosa. Andres le dio un puñetazo. Y se fueron a los golpes ante " vamos, vamos,  yo le apuesto a este". El hombre serpiente le mordió la pierna al negro loco.  "No te metas con mi cena chimpancé de mierda" pronto las enfermeras los separaron. Un técnico antes de dormir le rasuraba la cara al pobre Andres que perdió el juicio.  Ahí sedado pensaba en sus padres y en sus ideas de destruir los Estados Unidos, el capitalismo, y tanta tontería junta.

Un sábado luego de estar cinco días encerrado sus tíos y padres lo visitaron . El llorando pedían que lo sacaran de este antro de locos.  Muentras la vendedora ofrecía sus prendas imaginarias y el negro loco y otros más bailaban salsa, sin que hubiera música. Sus padres le dijeron que hablarían con su médico. Pasaron otro cinco días encerrado y conversaba por las tardes cuando la somnolencia no lo invadía con Carlos aquel loquito, que dentro de todos no lo era.  Era extraño, pues cada vez que charlaba con Carlos, una enfermera los miraba con extrañeza, como si algo grave pasara. Las charlas eran interminables y pronto Andres encontró una mente criteriosa  y culta que lo escuchaba y aconsejará.

Llegaron los médicos con su madre y tíos y le hablaron al medico que a Andres lo podían cuidar en su casa, y que seguiría el tratamiento al pie de la letra. El psiquiatra examino a Andres, le hizo unas preguntas y pronto ya estaba a fuera con sus familiares. Habian sido diez días de riesgos y conversaciones extrañas. Andres nunca supo si Carlos era real o si era una alucinación, pues a él nadie venía a visitarlo. Pensó Andres quizás si estoy loco o era mi ángel guardián.

Perdió la universudad y dejó esas ideas de locos,  y se dedico a la carpintería y a la cocina. Poco a poco con un tratamiento adecuado y el cariño de sus padres salió adelante. Se hizo de una novia que comprendió su condición y decidieron no tener ningún hijo, por el mal de Andres. Las alucinaciones y su conducta efervescente no volvieron.  Y hoy Andres es un conocido empresario forestal. Ahora este loco solo ve los espíritus de la selva cada vez que arrasa con un árbol. 

jueves, 8 de abril de 2021

La chica del club.

 



Cuando era un adolescente de 14 años todos los veranos íbamos con mi abuela, mi tío y mi hermano menor a un club de la policía llamado el Changrila. Eran los días sábados que íbamos a ese lugar de esparcimiento con piscina y cancha de fulbito. Ahi los parientes de los sub oficiales de la policía solían pasar gratamente el verano entre amigos y familiares.


Recuerdo que para llegar salíamos  de los Barrios Altos hacia la avenida Gran y tomabamos el microbus que llevaba a Condevilla y bajamos en el hospital del empleado para latear hasta la avenida San Felipe,  donde al lado del canal 2 se hallaba el club mencionado en toda una esquina. Mi abuela era socia por ser madre de policías e ingresabamos raudo a los vestidores para chapucear en la enorme piscina del club.

Era chevere nadar en la piscina o quizás fingirlo. Pero me acuerdo que así como veía tremendas ballenas en traje de baño resaltaba una que otra vez alguna sirena de aquellas que solo miran fijamente y con presunción. En parte yo me la pasaba en el agua para espiar a una chica en específico que venía justo en aquellas tardes de los noventas a lucir su febril belleza.

Cuando trataba de fijar mi mirada en su rostro y que ella me viera,  lo hacía con desinterés y me hacía desplantes con su enorme cabellera. Se recogía la cabellera y se esparcia en toda la orilla de la piscina solo para que los bábozos de los muchachos nos quedáramos embobados por su extravagante presencia. Era un espectáculo ver lucir su figura. Era una chiquilla como de unos quince años,  blanca como un cisne y un rostro con unos ojos que solo miraban flores. Siempre que trataba  de cruzarme con ella me hacía unos amagues tan dolorosos que mi corazón hervía de cólera.

Una tarde después de comer en el restaurante  del club llegaron dos hermanos hijos de un policía  y nos retaron a mi hermano y a mi a jugarnos un pichanguita y quien perdía invitaba las gaseosas. Llegamos a la loza de fulbito y de inmediatos esos morenajes sacaban tantos pases con efecto y velocidad que el marcador ya estaba a tres cero. A pesar que yo protegía la defensa y trataba de filtrar mágicos pases con mi pierna derecha a mi hermano que conocía el oficio de delantero, pronto todos mis lances y jugadas eran neutralizados por esos monstruos del fulbito. Recuerdo que a pesar de mis esfuerzos perdimos 5 a 3. Con solo dos goles de mi hermano y un gol de mi patada con efecto. Pero eso no era la sorpresa. Pues esa chiquilla había estado todo el tiempo mirando el encuentro con sus hermanitos menores. Con razón escuchaba una risita burlona cada vez que marcaba a aquellas fieras del fútbol.

Al final del encuentro pagamos las gaseosas a los morenajes y de la nada se me acerco la susodicho nena cerca a donde descansaba en la tribuna y me dijo:

-  no sabía que esa carta de payasito existiera  todo un gran pelotero. - hizo esto y me dio un beso en la mejilla izquierda huyendo de inmediato hacia la piscina a seguir rompiendo ojos. Me quedé estupefacto y una sonrisa ingenua se dibujo en mi sudado rostro. Me quedé unos minutos remecido en la loza deportiva mientras mi hermano y mi tío que era menor me jodian con ese chabola que estaba más bueno que el pan.

Me resistí a volver a la piscina pues andaba con roche. Así que espere a que mi abuela Maria me viniera a buscar y me fuera del club completamente embrujado por esa niña traviesa.  Cuando se acercó el siguiente sábado no fui. Mi hermano me contó que tampoco aquel día la había visto. "Seguro tiene novio, no te ilusiones hernano" me decía mi ecuánime hermanito mientras ya se acercaban los días para el regreso al colegio Lasalle.  Volví a ir al club con mi abuela pero ya no había asomado su presencia por aquel lugar. Solo recuerdo que pregunte como se llamaba al administrador y el solo me decía que era hija de un coronel. No sabía su nombre. Así que me decidí olvidaría y ponerme a estudiar duro y parejo pata mi tercer año de secundaria.

Un día mientras nos regresábamos en la custer de San Bartolo a mi hogar de Surco se subieron una patota de chiquillos y llenaron los asientos. No pude ocultar mi sorpresa cuando de entre los muchos adolescentes subió aquella sirena en shorcito y se sentó a mi lado solo para Joder la pita. 

Me hice el que no la conocía. Me dispuse a solo mirar las calles por las lunas de la custer, pero era imposible. Los chicos pusieron tecno a todo volumen y esa chiquilla empezó a bailar en el asiento chocando sus caderas con mi hombro.
- ¿acaso no te acuerdas de mi payasito? En el club la chica a la que venerabas.
- me voltie y le insisti que no me molestara
- ¿ que acaso no tienes huevos para hablarle a una chica? Que estés planchadito no quita que seas bien piedra.
-  si eres la chica que me dio un beso en la cara, ¿pero acaso de algo sirve?
De inmediato les contaba a sus amigos por mi timidez y todos me vacilaban con bulla y bailes en el pasillo de la custer.
- eres un tonto, yo te esperaba en la piscina y tu te desapareciste. Ahora el destino hace que nos reencontramos. 
- te me pones en bandeja.
- si y ¿ que vas hacer?

La tome del rostro con mis dos manos y le estampe  un beso que que duro una eternidad. Ella respondió y por espacio de unos segundos reino el silencio, hasta que reinicio el escándalo " así se hace hermanito" grito mi hermano. Y todos gritaron en el acto. Nos besamos por largos minutos y nos decíamos que nos volvamos a ver. Cuando baje de la custer todo se envolvió en una promesa y un teléfono que ella me escribió en mi brazo izquierdo.

Al llegar a mi casa aún muy pensativo mi hermano menor me dijo que la llamara. Pero algo pasó en mi. Una fuerza extraña que hasta ahora me impide ser feliz  me hizo que pasara el tiempo hasta que me decidí a no hacerlo. Era el empiezo de una timidez hacia el amor y de una vida bohemia con las desconocidas. Lo clandestino me atrapó. Ese beso fue como el beso de dos perfectos desconocidos. 

miércoles, 7 de abril de 2021

Pacto de sangre.

 



Yo siempre le tuve un gran cariño a mi amigo José. No sólo fuimos colegas sino amigos de fiestas y aventuras. A él lo conocí a fines del primer año de economía.  Conversamos varias horas y luego nos fuimos chelear.  El es un galán que con solo mirar a una mujer tiene la facilidad para seducirla. Yo en cambio soy más tranquilo y confío en la fuerza de una genial conversación para atraer a una mujer. Con el tiempo nos fuimos distanciando al culminar la carrera, pero sucedió algo que estuvo a punto de terminar con nuestra larga amistad.


Durante los últimos tres años de universidad yo tuve un romance con una chica llamada Sonia. Ella era jefa de prácticas en filosofía y nos sentíamos bien juntos haciendo el amor con la música de metálica. Nuestras vidas se cruzaron porque ella era una genio y una belleza que lo hacía interesante. La verdad es que no se como nos hicimos enamorados. Solo se que una mañana hasta le hice el habla en un paradero de la puerta 3 de Unuversitarua a la emblemática Sonia, y le habrá gustado mis lances de colegial que el amor prendió y pronto hacíamos todo juntos sin que nadie sospechara de nuestro romance en la ubuversudas.

Lo que paso es que Jose por accidente le echo el ojo a Sonia y por resultar muy interesante le daba sus lances de incorregible seductor. Ella sabía que era mi amigo y que le hiciera el pare, cosa que no podía hacer pues se revelaría el susodicho lazo de amor que me unía a Sonia.

Lo que hice fue llevarlo a chapar a uno de los huariques de Pando y tomando y tomando, y cantando boletos cantineros le revele en secreto que Sonia era mi enamorada. El lo tomó como una gran sorpresa y prometió no interponerse más en mi relación con ella. Para ellos nos cortamos con las botellas de Pilsen las manos derechas y juramos bajo pacto de sangre no meternos nunca con la novia de un amigo.

Todo iba bien hasta que el poligamia de mi amigo le sacó la vuelta a su enamorada con la hija de su jefe de trabajo, y ella vino de frente a decirme que no lo alcahuetara nunca más. La vi tan indignada que no se me ocurrió otra cosa que sacar un roncito que tenia en mi mochila y los tomamos juntos para ahogar las penas. Yo prometí nunca volver a tapar a mi amigo pero me la ponía difícil porque eramos compañeros de aventuras.

Como vio en mi rostro la duda de acogerme a su pedido de mujer despechada me contó una historia que jamás pude confirmar porque yo y Sonia ya habíamos terminado. Me contó que entre mi amigo y Sonia había surgido una relación ocasional. No le creí de inmediato pues Sonia despreciaba  a José, pero pronto me asalto la duda. Mientras así estábamos chupando ya cervezas Favi mi amiga y enamorada de José me dio un beso en la boca y pronto lo que era solo odio y desahogo termino en una noche de sexo casual que me impresionó mucho.

En los siguientes días evite a José y lo vi rogando a Favi para que volvieran. Se me acerco después y lo tuve que proteger pues estaba tan desesperado por los celos que buscaba en cada rincón de la facultad al supuesto partidor de su noviazgo con Favi. Para serenarse lo lleve a chapar unas chelas y lo vi con que sentimiento cantaba, que tuve que revekarle quien era el supuesto nuevo novio de Favi. Con la cólera también de que el se había metido primero con Sonia y eso rompía nuestro pacto de sangre.

- oye huevon- te metiste con Sonia, así que yo me metí con Favi, pues rompiste nuestro juramento, ojo por ojo cuño. 
- ya te fragaste salgamos de acá a liarnos a golpes. A lo que accedí pues estaba también con rabia y borracho.

Todo fue un show. Dos borrachos peleándose tratando de asestar siquiera un golpe. El me asesto varios golpes en el cuerpo y yo una patada y un rodillas en el estómago. Estábamos así peleando entre una multitud de mirones que de la nada surgió Favi a meter más candela al lío de amigos. Ella decia:

- matense si son hombres, agarren piedras y matense si tienen huevos.

 Lo gritaba tantas veces que nos hizo reaccionar. Nos miramos fijamente entre amigos con nuestras caras ensangrentadas por la pelea y fuimos tras Favi. La cargamos entre ambos y la arrojamos a un charco que había en esa pampa de Pando. Mientras ella gritaba para zafarse y en rabia por estar toda todo empapada de barro aparecieron entre la multitud dos bellezas que no paraban de reír por el espectáculo que protagonizamos. Nos acercamos a ellas y les invitamos unas chelas mientras los imperdibles amigos tararreaban un bolerito de Alci Acista para enamorarnos. Lo que sucedió es arena de otro costal . Solo se que nue nuestra amistad se distanció, pues así es la vida nos deja con pocos amigos. 

domingo, 4 de abril de 2021

Anecdotas de congreso. Año 2000.

 



Voy a contar una de las travesuras de mi amigo José en un congreso de economía en el año 2000. El me había emborrachado para saber si cortejaba a Janet, cosa que le dije era imposible pues era mi amigo. Este pendejo se sentaba todos los días al lado de ella para que lo aceptara. Y a pesar de que sus amigas le advertían que era un mujeriego ella al final lo acepto. Yo retire mi ataque pues me gustaba y se hicieron enamorados.


Cuando sucedió lo del congreso en la ciudad de Huancayo yo no pude asistir. En ese tiempo trabajaba en las madrugadas de limpieza en un hotel de Camino Real, y no tenía permiso de mis jefes. Solo les desie a mis amigos que les fueran bien.

Muchos de mis amigos llegaron a Husncayo no para asistir a las conferencias o grupos de debate, sino para pasearse y para la noche ir a las discotecas de la ciudad. Al regreso de José el mismo me contó todas las travesuras que había hecho sin querer. El me contaba con una sonrisa en la boca. 

'Cuando llegue a Husncayo no supe cuantas de las chicas de mi salón se morían por mi. En mi cuarto se me metió Sabrina y no supe hasta allí que era ninfomana. Todss las noches hacíamos el amor en la ducha mientras en los pasillos un gay gritaba quiero un hombre quiero un hombre. Yo me reía y la pasaba bien con Sabrina que se iba al cuarto de otro chico a seguir complaciendose. 

Cuando por fin me deshacía de esta melosa llegue a la discoteca y en una noche de juerga y alcohol se me acercaron Charito y luisa totalmente ebrias a besarme. Yo me deshice de ellas pues estaban como gatas en celo y me fui a la barra a tomarme un trago.  Ahí se me acerco Lizeth y me invito tequilas para marearme y aprovecharse de mi borrachera. Tome varios tequilas y cuando me propuso chapar en la calle, se presentó su enamorado por atrás, y ella entró corriendo a la discoteca gritando que me había aprovechando de ella. Era el acabose. Me escape de esa escena de chantaje y me fui a dormir a mi cuarto donde me esperaba Sabrina para seguir el coito de todas las noches.

Al día siguiente yo quería dejar la diversión a un lado. Quería escuchar las conferencias y participar en los grupos de debate. Estaba en recepción medio resaqueado cuando el encargado del hotel me dijo que unas señoritas que acababan de llegar necesitaban información del congreso. Cuando voltie a verlas eran cuatro chiclayanas hermosas. Me les acerque y les mostré ls información de mi carpeta del congreso. Fuimos a una de las conferencias hasta que después de escuchar dos de ellas , una de ellas propuso ir a un bar a tomar unas chelas. Yo acepte en el acto pues eran unas mamacitas.  Cuando ya el licor nos subió a la cabeza me propusieron seguirla en su cuarto del hotel cosa que yo accedí. Entramos y pusieron música trans para tonear. No se como luego de beber ron yo bailaba desnudo con las cuatro chicas también desnudas, y empezó la orgia. No se como me distribuía para dar placer a estas cuatro mujeres, solo se que mi animal travieso quedó rojo y alicaído. Ellas se quedaron jato, y yo estaba a mis anchas durmiendo entre tanta belleza.

Tenía que salir de ahí. Cuando estaba saliendo en los pasillos varios de mis amigos me vieron que salía de un cuarto extraño y me dijeron buena José. Yo me escurri a mi cuarto y me quedé dormido hasta bien entrado la noche. Ya solo quedaban una noche más y acababa el congreso de economía. Y yo ya tenía varios anticuados.

Cuando llegue a Lima y regrese a la universidad Janet me separo para un apartado y me dio una cachetada que me la tenia bien merecida. Perdí a mi enamorada y desde entonces me senté en otro lugar del salón. Todos me preguntaron de mis aventuras cosa que solo hice contigo, pues eres el más discreto. Fueron unos días locos'

Cusndo escuche el relato de José no me pude aguantar la risa. A pesar que yo estaba detrás de Sabrina no me importo demasiado, así que le propuse a José tomarnos unas chelas esa tarde, y así terminó la historia de mi amigo al que chalequie varias veces en nuestros años de universidad. 

jueves, 25 de marzo de 2021

Rivalidades por Alexandra.

 



Hace como dos años publique una ficción sobre mi encuentro con dos chicas del colegio Santa Maria en un microbus. Las había llevado a una playa en Magdalena y luego las embarque en un taxi mientras no dejaba de pensar en Alexandra, una de ellas...


Mi sorpresa fue mayúscula cuando uno de mis amigos de Lasalle me invito a pasar el verano del 96 en su casa de playa en Punta Negra., y la halle veraneando en plena playa. Se había vuelto luego de dos años de nuestro accidental encuentro en una mujer muy bella, un rocío del mar en épocas doradas. No me le acerque y creo que ella no me reconoció. Pero toda esa tarde de verano en la playa no deje de pensar en ella. Mi amigo decía que la conocía y que podía presentarmela.  No le creí pues era muy tímido para semejante princesa.

Recuerdo que en la noche luego de veranear ya dos días y no tener más rastros de ella en la playa, fuimos con mi pata a una discoteca y mi asombro fue verla en la pasarela que habían montado en el centro de la pista de baile, en un bikini de infarto, mostrando un cuerpo que revolvió mi mente en un santiamén. Habian otras chicas pero ella destacaba por una dulzura casi virginal y por una aura resplandeciente que hizo temblar mis sentidos llenos de locura. Por momentos alucinaba su cuerpo desnudo con el mar y yo buscandola entre las olas para ser solo una unidad empalagosa de fluidos y estremecimiento.

Ella no me recordaba. Aquella tarde en el mar había sido solo una travesura de las tantas que esta sirena provocaba.  No merecía tal hermosura ni en mis sueños más eroticos. Así que aproveche mi momento de diversión y empecé a conocer a las amigas de mi anfitrión, que me ponía las chelas y los puchos. Me quedé impresionado con la gentita del sur. Cerca de mi estaban las hermanas Cayó, leslie Stewart, y otras figuras de la farándula que jalaba harta coca. Aunque Restrepo decía que era un infundió yo si veía deslizarse la merca por entre las manos de sus amigos y hacer extravagancias por el efecto de los estupefacientes. Bueno yo bailaba una que otra salsa que ponían con la prima de Restrepo,  y bebía con moderación. Pronto la fiesta se mudo a una casa de playa de unos de los amigos de Restrepo. Todos fuimos en auto y en compañía de bellezas que me hurgaban con extrañeza mi presencia súbita. Era solo un flaquito con buena ropa y una mirada subliminal.

Cuando llegamos empezó la juerga. Todos los mayores bebían y bailaban en grupos con las chicas, roceando el licor de boca en boca. Estos tucos eran de armas tomar. Pues sacaron pastillas de extasis y más licor de la cocina. Me anime por presión de Restrepo a probar el extasis. Y cuando ingreso en mi organismo me exalte tanto que empecé a bailar sin fijarme con quien una salsita de Eddy Santiago, cogiendola de la cintura . La sensación que se apoderaba lentamente era de una alteracion electrizante. Mientras ya no coordinaba movimientos y solamente abrazaba a esa chica todo el tiempo en que tronaba la musica, pude notar que su rostro estaba cubierto por su enorme cabellera castaña. No sabía quién era esa chica, ni ya reconocía lo que mis instintos hacían en aquel momento. Solo se que después de tres o cuatro piezas ella me dio un beso en el rostro desapareciendo entre los cuartos oscurecidos. Jamás supe quien fue. De pronto se me vino las ganas de devolver. Corrí hacia la playa y entré las olas frías vomite toda aquella noche llena de alcohol y drogas.

No sabía dónde estaba Restrepo. Por ubicación llegue a su casa y el no estaba. Me pude escabullir por la terraza que da al mar y dormí en mi cuarto no se cuantas horas. Cuando desperté mi amigo comía una pizza en el comedor. Al verme despierto me hizo unas señas para que me le acercara.  Comí con el varias rebanadas y de la nada al verme profundamente a los ojos.

- vaya que si te lo quedaste ayer
- si que fue una noche donde no me pude percibir.
- Ella me ha estado llamando al fono por ti.
-quien es ella?
- la chica con la que estuviste parado como un árbol. Alexandra me dijo que no la soltabas y que le gustó tu aroma a niño bello.
-en verdad te dijo eso? O me estas jodiendo?
-Naca la pirinaca.  Ella es mi amiga y prima de Tota, el gordo del colegio.
- Ese huevon donde esta, no recuerdo haberlo visto ni en la discoteca ni en la casa de la juerga.
- El estuvo con su novia en uno de los cuartos jalando de la buena.
- no me importa solo me gustaría disculparme con tu amiga,  estaba drogado seminconsciente, no era yo.
- Vaya que eres un colegial aun, yo que tu voy de frente. Ahora es un chica segura.
- pero la has visto es una mamá cita, cuantos cuervos devén estar detrás de ella.
- yo creo que deberías intentarlo ella jamas se deslizó de tu apretón, estoy seguro que le gusto.

En ese instante aún pude percibir el olor de su perfume de hembra en mi cuerpo. Quería estar con ella. Pero no sabía si aquella vez en la playa de Magdalena lo recordaba. Preferí aquel día no salir a tonear en Waykiki. Estuve en la terraza despejando mi mente y recordando embelesado lo que hubiera pasado con Alexandra. Quería desnudarla, arrinconada y verla volar. Pero era un chiquillo enjuto y llene de inseguridad. El sol del crepúsculo y las olas que llegaban a mis pies me produjeron somnolencia. Dormí como una hora hasta que alguien me despertó de improviso. Era ella. Era Alexandra.

- no te asustes mejor es que te deje dormido. Tuve miedo que el mar te jalara.
- No no Alexandra- me quede silenciado de súbito.
- como sabes mi nombre seguro Miguel el de tu colegio Lasalle te dijo como me llamaba. Pero tu como te llamas?
- yo,yo, carajos me llamo Rodrigo.
- jajaja no te me chivees no soy un tiburón. Que haces aquí? Tan sólito.
-- Pensando solo eso en el mar.
-' eso es para los melancólicos. A mi me gusta la alegría. Hazme la taba por la playa ahora esta desierta.
-- ya vuelta.
- acaso eres charapa  jajajaja.

Caminando en la orilla del mar ambos iban silenciosos mirándose de reojo. A tientas ella le iba tocando la mano y jugueteando con sus dedos. Ella lo miraba y su cabello simulaba una sonrisa casi imperceptible. Rodrigo se sentía absorto como dominado por una fuerza que lo enmudeció y lo hacía temblar.
- te gustaría ir a la fiesta de mañana en mi casa ? Va haber de todo desde comida hasta de la buena.
-- Ni más el extasis. Solo con mi chela.
-- si que te pego duro la pastilla. No me soltabas por nada. Me deje porque temía que te volvieras violento.
-- la verdad que no te quise hacer pasar esa vergüenza. Lo que no entiendo es porque me diste un piquito.
-- yo no te di ningún beso. Estas drogado aún.jajajaja .
-- bueno no se, ya se acerca la noche y su friecito hace, que tal si nos guardamos para mañana.-- le dijo a Alexandra.
-- acompáñame un ratito más, si que hace frío. Se me ha vuelto la piel de gallina- y como pidiendo un abrazo se sentó en la arena. Lo jalo a Rodrigo a la arena, y el entendiendo el doble sentido se abrazaron sin decirse nada, tal como fue la noche de la fiesta previa. Se despidieron casi sin preferir palabra. Ella le guiño un ojo una sonrisa tan elocuente que Rodrigo solo atino a sonreír y bailotear entre fantasías.

Al día siguiente todo transcurrió con normalidad.  Restrepo no se hallaba en su casa y pronto se haría de noche. Llego el atardecer y Rodrigo se vistió con su mejor camisa y su mejor Jean. El era delgado y con mediana talla. Lo que resaltaba de él eran sus ojos almendrados y su cara sonrojada por el calor. Veía la TV mientras se hacía más de noche. Cuando ya dieron las 11 de la noche cerre las puertas de la casa y se  deslizó hacia la playa en dirección a la casa del otro día. Resultaba que era la casa de Tota, el primo de Alexandra, aquel abusivo tuco que le tiraba agua a su uniforme y que de vez en cuando llegaron a los golpes en Lasalle.

Cuando llego la fiesta estaba en todo su esplendor. Me precipitó desde la playa hacia el enorme jardin y me salió al encuentro Restrepo algo excitado por la marihuana que había consumido. Me presento a unos amigos y pronto ya estabamos cheleando en la sala central. Rodrigo esperaba a ver a Alexandra por algún sitio pues era su casa. Pero al que vio a lo lejos fue a la Tota, quien era el centro de la atención de todo el mundo. Ahí Rodrigo pudo comprobar que su enamorada resultaba ser la amiga de Alexandra en aquella playa de Magdalena.

Ella si pudo reconocerlo y le dijo al oído algo que altero de pronto a su novio. Busco entre la gentita con sus ojos a Rodrigo, y en cuanto lo hallo se fue en contra de el como un loco. Se desató una pelea entre ambos medio borrachos,  que solo fue contenida por la aparición nítida de Alexandra. Ahi supo que lo dicho por Restrepo era verdad. Rodrigo no tenía nada que hacer ahí. Se tropezó varias veces y se fue por el jardín hacia la playa. A lo lejos- mierda vuelve te has metido con mi prima-.

No le hizo caso. De pronto una pesadumbre se apodero de él e ingreso a la casa de Restrepo con las pocas fuerzas que le quedaban. Se acostó en bóxer en su cama y pesadillas de rencor acumulado se apoderaron de él. La pelea en casa de Akexandra no había pasado de algunos empujones y puñetazos, pero la rivalidad era fuerte, debido a que en el colegio varias veces había salido a favor de los amigos a los que maltrataban la patota de la Tota. Todos ellos eran tucos y el solo un advenedizo de los Barrios Altos que no estaba de acuerdo con él racismo de ese colegio. En sueños venía a su cabeza la hermosa Akexandrs, pero también venían imágenes de una golpiza.

De súbito se despertó y vio en el jardín una silueta que se deslizaba rápidamente sobre el jardín. El creyó que eran unos ladrones o Restrepo mareado. Pero esa sombra en la penumbra de la noche se echo en su cama y empezó a besarle. Era Alexandra no había duda. Su perfume era inolvidable.  Sólo supo que ya desnudos llevaron sus cuerpos extasiados al mar en esa noche donde la Luna alumbraba tenuemente.  El cuerpo de Alexandra era exuberadamente delicioso, una gota de rocío en un fuego fatuo. Caramelos y caricias iban y venían. Y las curvas se acopladas con desparpajo y hambre de emociones infinitas. Ella era un volcán y el un tigre saboreando sus proezas y lo afortunado que era en aquella madrugada. Ella envolvió y siempre le exigía mayor locura en sus asestadas de hombrecillo desesperado por ella. Cuando todo se detuvo y la espuma del mar bañaban esas osamenta liquidadas por el fuego del amor,  ella solo atino a decir:

-- ¡olvidame!-- cuando Rodrigo escucho ese susurro final solo dijo lo que ella quería escuchar.
-- OK linda fue corto pero eterno.
---' jajajaja nunca tendrás una mujer como yo.
---- es cierto, pero yo conoceré el amor.
--- es una broma?
-- en lo absoluto. Adiós mi corto verano

Ella escucho esas palabras con total frialdad y se alejó entre las sombras de la playa. Rodrigo jamás volvería a saber de ella. Fue un encuentro que jugo al romance insultando a la pasión. De este modo viviría sus amores extraños Rodrigo, sin saber con quién se acostaba y a quien despedía.



domingo, 21 de marzo de 2021

Una aventura de ayahuasqueros

 


 


Mientras dietaba hace cuatro años en la tierra colorada conocí a un amigo limeño de los shipibos. Se llamaba John y era un tipo como de unos treinta años un tanto fornido y medio morocho el puta. Ya Walter el shipibo que me acogía en su casa me había dicho que el era un dietador de plantas maestras, y que más que ser un curandero era un aprendiz de curanderos que tenía actitudes un poco incorrectas para curar.

Lo conocí mientras no se hallaban los padres de Walter en casa. El maestro José semanas antes que llegara yo a Pucallpa para dietar lo había curado con ayahuasca de unas malas energía y vibraciones causadas por sus malos aprendizajes y andanzas en la vida. El quería poder y aprendía de un modo incorrecto el oficio de curandero, creyendo que el libro sobre los ocultismos le daría el control sobre las energías de las plantas. Hacia un ingreso desmesurado de información sobre sistemas de sanación y de ocultismo de todo el mundo, por videos y textos secretos, sin darse cuenta que eso entorpecía la pureza del oficio de curandero.

 

Por alguna razón había empatía entre nosotros. Discutíamos sobre los Incas y la vida de Jesús. Para ellos Jesús era un curandero, el maestro de maestros. Y como ellos John que era un tipo en el fondo bueno, pero con miedo, deseaba aprender mejor el poder sobre las dietas de plantas para curar. Por alguna razón no sabía, ni tenía la sensatez para controlar un poder que en el fondo era muy peligroso, y con el que ningún ego o soberbia es buena. Lo escuchaba y teníamos cierta cercanía porque los dos éramos bocones y cada uno en lo suyo poseía buena información. Yo no leía hace mucho tiempo, como parte de una dieta mental, y él leía y devoraba todo lo que se relacionara con brujería y magia. El libro en el fondo no te da el control sobre nada. Es muy vertical a veces, pues te da lo que funcionó en la experiencia de algún otro que deseo comunicar lo que aprendió. Son solo orientaciones, guías normativas que hay que comprobar con la propia experiencia. Hay que ser empíricos radicales, sobre todo en todo tipo de aprendizajes como el shamanismo donde hay que saber controlar mucha energía y poder de curación.

 

Bueno yo seguía dietando pero ya podía asearme. Me daba como tres duchas diarias, y salía a caminar por todo la comunidad de San Juan, para jugar con los niños y ajetrearme con las imágenes de paisajes y de la vida en comunidad. John venía poco a la casa, pero ya oportunamente sabiendo que no estarían los maestros, vino un día miércoles en la noche para tomar ayahuasca con Walter. Ya me había dicho con anterioridad que le proveyera de mapachos (Tabaco) y agua florida para la ceremonia.  Noches antes Walter me había contado que el se había tomado otra planta, pseudo ayahuasca (alucinógena) con un pata de otra parte de la ciudad, y que lo que buscara era abrir los chakras, para tener la visión de los shamanes shipibos y así diagnosticar mejor. Ambicionaba poder curativo sin haber puesto en paz el alma…

 


Esa noche vino a  la casa, y dejo en penumbras la cabaña, mientras los hijos de Walter y su esposa ya se habían quedado dormidos. Se apuraron cada uno un trago de ayahuasca, y luego de conversar sobre sueños y ajetreos de brujos vino la mareación…  Sus canticos, icaros y oraciones eran en shipibo y en castellano… Walter se quedó semi-dormido, y John le provino un golpe de mente; se mareo tanto, que le entro miedo y empezó a devolver en el baño de la casa. Yo lo ayudaba, y aunque era pesado lo esperaba. Se empezó a asustar y por celular empezó a  llamar a sus maestros diciendo que los brujos le habían golpeado la ceremonia. SE estaba quedando dormido, y a la vez el cuerpo se le enfriaba. Nos pidió en medio de la noche que lo acompañáramos a la casa del tio de Walter, para que le cerrera la mareación y lo enderezara.

 

En medio de los ladridos de los perros y de charcos de barro y terrales llegamos  a la casa del tio de Walter. Nos recibió callado y medio dubitativo, lo soplo a John, y la mareación y las ganas de vomitar no le dejaban. Le aconsejo que se mojara, y con el agua se despertara, y perdiera un poco el miedo. No lo dejaba el problema. Walter y yo lo sosteníamos en medio de una noche virgen de estrellas a John quien aterrado cantaba oraciones a Jehová para que no perdiera el valor. No había quien condujera el motocar del maestro. Sabía hacerlo el hijo de Walter,  Enrique, pero era una adolescente de 14 años. Luego de tanto rogar y ya atemorizados Walter y yo por lo que le pasara a John, fuimos más al fondo de la comunidad de San Juan a buscar a Oliver, primo de Walter, quien si podía manejar el motocar y llevarlos a un maestro de más nivel que lo enderezara de verdad. Oliver salió de su maloka, en la noche y le llevamos rápido por la carretera que conducía a la ciudad de Pucallpa, a una comunidad barrial de la Hoyada donde había un curandero que si lo podía enderezar.

 

John lo eligió por su supuesto maestro, y abrigado y temblando en la madrugada llegamos a la Hoyada donde el shaman Víctor nos recibió y con mis mapachos lo enderezaron en medio de icaros y oraciones oscuras. Conocí a Oliver y le conté mientras esperábamos a John y a Walter mis sueños y aspiraciones luego de la dieta…. Amaneció y salió enderezado y más recuperado. Decidió John quedarse en la casa de Víctor. Le había agarrado miedo a la cabaña de Walter, donde había dejado sus demonios y diablos.

 

Nos contó al otro día que al marearse y entrar en el climax de las visiones y aperturas de conciencia como que una botella se quebrara, e icaros malignos de brujos en la oscuridad de la noche lo maldecían e insultaban. Aterrado nos contó que se le iba la respiración, y que los huesos se le rompían. Cerrado en que los brujos querían matarlo, me contó que cuando veían a un dietador los brujos ignorantes los soplaban para matarlos y que el oficio de la magia blanaca que cura a través de las plantas se olvidara. 

Se regresó a la Lima en avión y me deseo que me mejorara. Yo con mis achaques lo ayude como a un hermano, y le desee que se hallara en este  el oficio de las energías limpias y oscuras. John tiene el don del curandero,  tiene el mariri de las plantas en el centro del pecho, pero aún no maduraba y no dejaba atrás los problemas que lo acechan y carcomen. Yo salí de la oscuridad pero el conocerlo me ayudó a mí mismo y respetar este el saber de mares de los curanderos… Quien entiende las junglas no debe buscarlas en lo evidente, objetivo y manipulable de las comunidades. Sino en los saberes que están más allá de los lenguajes y la razón. El verdadero control no es racional, y hay que tomar cosas como la ayahuasca para darse cuenta que el ser humano vive honrando falsos saberes de sectas

A veces hay que ser fosforito

 




Un día un amigo que no aguanta pulgas estaba medio movido porque su enamorada lo había terminado. Quería tomarse unas helenas y charlar de cualquier huevada que lo mantuviera entretenido. Me contó que llamo a su causa un geógrafo que siempre andaba con gringas y que siempre se prestaba para sajironear por ahí. Lo llamo y creyendo que estaba en Berlín, resulto que estaba en un bar muy conocido de Guzmán Blanco. Llego con los ojos somnolientos y los cabellos medios erizados por el broncón que tenia adentro. Al llegar su pata de veinte años y un grupo de europeos y peruanas lo recibió con sonrisas y muestras de afecto. El geógrafo hablaba de algo así de sus andanzas en México y Japón, la comida, los tragos y las mujeres. Había un francés muy jovial que lo secundaba con ironías finas y gratos versos ilustrados. Junto a el se hallaba una chica que al parecer era peruana pegada a su brazo, completamente embobada. Bueno pensaba mi amigo el puta es agradable y muy positivo, además le gustaba filmar documentales en el Amazonas.

 

 Luego había un alemán alto y curtido, que hablaba de Machupichu, y de la buena comida peruana. También otra peruana estaba como chicle a su lado, besándolo en el cuello mientras todos cheleabany alguno que otro se pajareaba un porrito. Y había una tercera pareja de un español con una pintora a la que mi amigo reconocía por fotos. Todos se sazonaban y piteaban, y era todo risa y conversaciones sobre cultura y arte. Hasta que el francés empezó a hablar de los pisados, y de un reportaje que había visto en TV, donde se burlaban del cosito y Nadine. Porque son pisados los peruanos, dime Cesar? El que no tenia pareja dijo porque las ven como la madre que no han tenido o que los ha maltratado. Entonces el alemán replico acá los hombres no han madurado nada, a lo que las chicas asintieron con un si muy sonoro. 

Mi amigo solo observaba y escuchaba con atención hasta que su amigo Cesar le pidió la palabra presentándolo como una eminencia. Ya ya Tragón voy a dar mi opinión. Creo que El cosito, como Cristián Suarez, o el novio de shakira se dejan pisar, porque llevarle la contraria a sus parejas es perder. Siempre les dan la razón y a todo les dicen entiendo, entiendo, pero siempre hacen de las suyas, aun cuando sus mujeres siempre lo saben todo. Al decir esto medio ebrio los europeos y Cesar cayaron y las damicelas pero sobre todo la pintora cuzqueña lo insultaron de machista y misógino. El se quedo cayado, pero percibió que la pintora le había mentado la madre.

 

 Lo paso por alto, pero cuando cambiaron la conversación la pintora fuera de si volvió a mandarle una indirecta como si fuera un maleante. El que no quería ser ofensivo con una dama distrajo su atención en otras mesas y vio en una de ellas a tres borrachitos que insultaban por xenofobia a los europeos. Eran tres viejecitos jubilados a los que mi amigo llamo la atención y les grito que no sean resentidos y que los dejaran en paz. Los europeos menos las chicas y el español agradecieron el gesto. Entonces como ya mi amigo estaba picado contó una historia. 

Cierto día un Cocama salió a dietar por seis meses dejando a su mujer e hijos en su maloka cerca al Amazonas. Cuando ya estaba flaquito y comía solo pescado y plátano asado, cerca a las orillas de una quebrada, se concentro con su cashibo para ver como estaba su familia. Y vio s sus hijos jugar fuera de la maloka sin el cuidado de su esposa. Se concentró mas y busco su energía y la hallo siendo le infiel con un mestizo que comerciaba con su comunidad. El cocama se aguanto la rabia pues ya quedaban seis días para cerrar su dieta. Al regresar le saco al fresco su infidelidad, y ella muy ladina lo negó hasta el final, sabiendo que su marido tenia habilidades de ver a distancia. El cocama la boto de la maloka y la dejo sin sus hijos." 

Al oír esta historia la pintora se erizo y le dijo maricón de mierda. " si muy listo y como no puedo pegarle a una mujer por muy mal educada que sea, tu novio va a pagar pato. Agarro la botella vacía de Cristal y se la rompió en la cabeza al pobre español, que quedo desmayado. Los borrachitos aplaudieron y el todo campante vocifero por eso los Incas perdimos con los españoles.

Un quiñe a un pegalón

 


Un buen día me hallaba por la plaza Manco Cápac, en dirección a las agencias de transporte a la selva. En mi locura pues los palos de poder me hacían soñar con Inkas y roales ancestrales le hablaba al Inka, y prometía justicia para sus tierras. Tenia que recoger una encomienda de toe y sanangos y luego salir hacia 28 de Julio. Yo desde muy pequeño conocía esos lugares pues a mi viejo desde siempre le gusto el tacacho y los Juanes. Recogí mi encomienda viendo varios palomillas en la zona, y guarde mis cortezas en mi mochila. Rumbo a Paseo de la república me pare a esperar mi combi y como demoraba no pude dejar de escuchar a una mamacha que lloraba en plena calle cuidando su carretilla de panecillos serranos. 

Me conmovió de tal modo la indiferencia de los mirones y el llanto de la mamacha que me acerque a comprarle unas rosquillas y de paso calmarla. " que pasa madrecita ¿pirqué lloras cálmate, que te han hecho?" no nada papito, nada solo que no vendo nada desde muy temprano y no tengo para darle de comer a mis guaguas", " ya, ya madre cita te compro esto y te dejo estos soles para ahogar tu preocupación, ya pero no llores" y le pase mi mano por el rostro en jugándole las lagrimas. 

De improviso un gordo borracho se me acerco y me increpo que dejara a su mujer , empujándome. "Es usted el marido de esta mujer le ha pegado? " " si y que? No cumple como le digo entonces le doy su golpe para que aprenda" su cinismo me llego de tal modo y como había dietado sanangos 

"así que te gusta ser profesor, te voy a enseñar la tabla del 4" y enseguida cogiéndolo de su chompa le zampe cuatro puñetazos y cuando ya estaba en el piso lo agarre a patadones. No se porque la mamacha lo defendió interponiéndose, y la cosa quedó ahí. Sólo se que al salir de ahí, había mucho mirón como si se tratara de un show. 

Justo pasaba mi combi y me puse a comer mis rosquillas, cerca a un caballero que me dijo algo cruel pero cierto: joven esto de la violencia en contra de la mujer no se va a acabar con educación, leyes duras, pena de muerte o cualquier medida democrática. Al león hay que hablarle en su lenguaje" El que tenga oídos que oiga.

 

Recordando a Fernando




Antes cuando tenia un inconveniente me iba al mar a escuchar el resonar de las olas. No se porque una mañana de Diciembre cuando ya mi Cuca estaba enferma de cáncer me fui hacia Punta Rocas... Era una mañana fría y muchos surf con sus tablas practicaban su deporte favorito cerca del oleaje mas bravo de esa parte del sur chico.... Baje por las inmediaciones de la plaza de Punta Negra con un pata que siempre me acompañaba a tomarnos una chelas, y que era del Agustino, pero vivía en Surco de pura suerte. Tenía ganas de un tronchito y vi a una niñita vendiendo golosinas y menjurjes cerca de la plazuela despejada. Me acerque y cuando cruzaba la pista pura trocha uno motociclistas pendejeos casi me meten la moto, pero si la botaron a la paisanita con todo y sus cositas al suelo.. Vi y tenia una herida, que sangraba, la lleve a una tienda con Pepe, el del Agustino, y justo había un pastor alemán en la puerta medio cachorro; lo que hice fue recordar secretos de mi barrio, y le hice que el can le lamiera la herida un ratito, luego la señora de la bodega trajo agua oxigenada, y le vende la herida.... Se paro pues los niños tienen poder de recuperación y se fue lejos de la plazuela...

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Ya alegre me salí hacia la playa, que es enorme y muy brava, y caminaba por los chalets aún vacíos, cuando cerca de la punta que da con San Bartolo, mi pata me dice que las motos esas que casi nos arrollaron estaban cerca de nosotros estacionadas en una casa buenaza de tres pisos donde en la terraza había una lora brava entre surfs y tucas, libando licor y marihuaneandose.... 

Pepe y yo fuimos y me senté en una de las motos, porque a mi me gustas las Harley Davidson mas que las cañas y prendi un tronchito haciendole siiiiisiiiii a una gringa que pasaba con su firme hacia la casa.... El muy salsa me dijo "Que te pasa imbecil.." y la gente que estaba en la terraza me gritaba que me saliera... Salió el dueño de la moto hacia el borde y me dijo..."Oe huevetas que haces en mi moto, sal a barrer el mar, o a cuidarme mi casa"---- 

Pepe me miro y con una piedra que tome del suelo le ralle su moto...Bajo el gringo y cuando se me venían entre tres.... Pepe grito "Que nadie se meta, mierda de uno a uno"....Me baje de la moto, y el gringo que venía con la baja guardia lo peche y me le fui pa las piernas, lo derribe y le zampe una patada en la cara, que quedo reducido en unos segundos.... Tenia una lata de cerveza creo de Pilsen creo y se la arroje en su cara burlándome.... " eso es para que tucos de concha de sus mare respeten a las cholitas y a los vecinos de esta playa...Oe y tu novia esta buena, deben andar con hombres"... Pepe se río conmigo y nos fuimos hacia la arena a tomarnos un sixpack que le habíamos requisado".... Pepe me dijo esos tucos se creen dueños del mundo, pero tu en el fondo eres como ellos.... "No, no cuño solo me gusta el lujo como a todos"........Esa mañana nos metimos al mar, y me dio gripe al volver, pensaba en mi tia cuca y su mal....

La desunion de una familia

  Hace unos meses conversaba con una vecina que es adulto mayor. Le decía que a pesar de tener 75 años se le veía muy conservada y fortaleci...