El yakuruna

Esta historia de la selva me la contó un buen amigo de Pucallpa, que sufrió años atrás una enfermedad y a base de su buena fe y corazón pudo sanarse con las plantas del kalanchoe. La historia es mitad mito mitad realidad. A veces la selva es un misterio sembrado de ensueños y peligros.

Una mañana por la restinga de yarinacocha unas dos amigas adolescentes chapoteaban en una quebrada mientras hacían tiempo para verse con sus amantes y retozar luego. Mientras jugaban en el agua, la corriente de la quebrada se hizo como un remolino y empezó a tragarse a ambas chicas. Mientras luchaban por salir se aferraron a los arbustos de la quebrada. Y una de ellas pudo salir porque empujo a su mejor y más bonita amiga al embudo.

Ella salió librada del peligro. Mientras su mejor amiga fue hallada por los pescadores enlodada y como en trance. Desde entonces esta adolescente no fue la misma. Se fue secando y no probaba comida, y murió hecha huesos y pellejo.

Mientras la otra amiga entró como hechizada y enfermo. La llevaron a los médicos y a los brujos y nadie podía curarla. Hasta que llegó con un brujo que la curo por 200 soles. Pero la chica no pareció aprender la lección y seguía en sus andanzas como una puta, ganando dinero con su cuerpo y belleza. Llevo a abortar hasta cuatro veces. Hasta que un dia hace 9 años murió de cáncer a los ovarios y como dijera la madre de su amiga ,murió por la ley del karma, hecha huesos y pellejo.

El yakuruna es un dios de las aguas que jala a los desprevenidos a las profundidades y los convierte en seres acuáticos. Lo mismo paso con estas adolescentes. Su suerte fue trágica, y por sus malas artes castigada por los misterios de la selva.